RECONSTRUCCIÓN POST BÉLICA
Las tropas de la Legión española se preparan para asistir a Iraq
Por Ana María Riaza2 min
España17-04-2003
El presidente del Gobierno, José María Aznar, aprovechaba la conferencia de prensa ofrecida en Atenas la pasada semana con motivo de su asistencia a la firma del Tratado de adhesión a la Unión Europea de diez nuevos países para anunciar las nuevas disposiciones del ejército español en el conflicto con Iraq.
Guardias civiles, legionarios, núcleos de apoyo logístico y los tripulantes necesarios para un segundo barco de transporte de la Armada. Hasta quinientos efectivos podrían sumar el total de efectivos militares dispuestos desde hace días por el Estado Mayor de Defensa (EMAD) para cubrir su plan de despliegue de la fuerza de paz española. De este modo, y una vez Estados Unidos dé por finalizado el conflicto armado en Iraq, España podrá sumar estos 500 nuevos efectivos a los 120 guardias civiles que ya operan en la zona, en su intento por pacificar las franjas arrasadas por los tanques aliados. Las tareas de ayuda humanitaria que diversas células del cuerpo de la Legión española llevan ejerciendo durante los últimos doce años en diferentes puntos de los Balcanes, como Bosnia o Kosovo, podrían repetirse en pocos días en suelo iraquí. Este despliegue de actuación de paz en Iraq responde a la llamada que el Gobierno de los Estados Unidos realizaba la pasada semana a los países miembros de la coalición aliada. El secretario de Estado norteamericano, Colin Powell, que dos semanas atrás exploraba en Bruselas la disposición de la OTAN a hacerse cargo de la misión de pacificación y reconstrucción en Iraq, solicitaba a Gran Bretaña y España el "inventario" de efectivos en misión humanitaria que están dispuestos a trasladar a Iraq una vez finalice el conflicto. Por su parte, José María Aznar ya ha anunciado las fases que llevarán a los efectivos españoles a prestar su ayuda en Iraq. Según el presidente del Gobierno español, la primera etapa se basará en la reorganización de los efectivos que actualmente se hallan en suelo iraquí, y más concretamente, en la región de Um Osar. Una vez finalizado el conflicto, la red de 500 hombres dispuesta por la EMAD se desplazará hasta Iraq para unirse a las labores de ayuda humanitaria. Aznar, además, hizo hincapié en la necesidad de iniciar, tras la caída del régimen de Saddam Hussein, una acción institucional en la administración y el gobierno de las ciudades iraquíes, así como en hospitales, escuelas y formas de abastecimiento de energía y agua, entre otros, y en los que, aseguró, España está dispuesta a participar con el envío de expertos. Por otra parte, y en relación al llamamiento internacional post bélico llevado a cabo por Estados Unidos, Aznar señaló que el ambiente de ayuda internacional hacia Iraq cuenta como uno de los aspectos fundamentales en esta nueva fase en el conflicto con Iraq, y acusó a la oposición española de, a diferencia de la recomposición de posturas en el seno de la Unión Europea, mantenerse inerte ante los últimos y más recientes cambios en el conflicto.