MONTENEGRO
La ajustada victoria electoral de Djukanovic no frena su ímpetu secesionista
Por Txema García2 min
Internacional26-04-2001
Los comicios presidenciales celebrados en Montenegro el 22 de abril eran mucho más que la simple elección del próximo Gobierno. El hecho de que, tácitamente, las elecciones eran un referendo sobre los deseos secesionistas respecto a Serbia de esta República balcánica, lo demuestra el alto porcentaje de participación, que superó el 80 por ciento.
Las encuestas, que auguraban una clara victoria de la coalición socialdemócrata (DPS-SDP) presidida por el presidente, Milo Djukanovic, principal defensor de la opción independentista, erraron. El DPS-SDP fue la lista más votada con poco más del 42 por ciento de los sufragios, con lo que obtuvo 35 de los 77 escaños del Parlamento montenegrino. Sin embargo, la principal coalición opositora al partido de Djukanovic, la plataforma Juntos por Yugoslavia, principal defensora del actual marco institucional, se quedó a tan sólo 5.000 votos de los vencedores. La plataforma liderada por Pedrag Bulatovic obtuvo el respaldo de más del 40 por ciento de los votantes (33 escaños). El tercer protagonista de la cita fue la Alianza Liberal que, con los siete escaños obtenidos se ha convertido en la llave del Gobierno de Podgorica. Djukanovic sigue empeñado en convocar entre el próximo 30 de junio y 13 de julio un referendo de independencia, pese a que las urnas mostraron un claro retroceso en la opción soberanista respecto a los sondeos que se realizaron cuando Slobodan Milosevic aún dirigía el Gobierno desde Belgrado. Críticas de la Comunidad Internacional El malestar internacional por la posibilidad de que Montenegro sirva como ejemplo a Kosovo y pueda complicarse la ya de por sí enmarañada situación balcánica llevó, una vez conocidos los resultados, a una delegación de la Unión Europea hasta la capital montenegrina, Podgorica, para tratar de convencer a Djukanovic de lo inoportuno de la consulta. Los montenegrinos ya dijeron no a la independencia en el referendo celebrado en 1992. Desde todos los sectores se ha criticado la viabilidad de un Montenegro independiente. La región adriática, que hasta 1918 fue un ente autónomo, cuenta con poco más de 640.000 habitantes en una extensión de 13.000 kilómetros cuadrados, un paro superior al 34 por ciento y una industria que sólo funciona al 40 por ciento. La mayoría de sus recursos proviene de las ayudas de EE.UU. como contraprestación a la oposición que el Gobierno de Djukanovic hizo durante los últimos años de Milosevic en el poder. Ahora, con la llegada de la democracia a Yugoslavia, estas ayudas se reducirán.