FÓRMULA 1
Nuevas normas para favorecer la igualdad
Por La Semana.es2 min
Deportes07-03-2003
El dominio insultante de Ferrari ha perjudicado el espectáculo de la Fórmula 1: el descenso de las audiencias y de la rentabilidad de la competición ha impulsado a la Federación Internacional de Automovilismo (FIA) a introducir cambios técnicos y normativos, aun a costa del enfado de algunos equipos, como Williams y McLaren, que han llegado a amenazar con la creación de un campeonato paralelo.
En lugar de las 12 vueltas permitidas en una hora y con todos los coches en la pista, la FIA ha apostado por un solo intento el sábado y con los monoplazas de uno en uno, similar a una contrarreloj ciclista. El orden de salida queda establecido en la sesión de los viernes, pero sólo cuentan los entrenamientos oficiales. Hasta la carrera, los coches entran en un parque cerrado, donde sólo se permitirán reparaciones limitadas, supervisadas por comisarios. La intención de la FIA es promover la construcción de motores que duren un gran premio en 2004, dos en 2005 y hasta seis en 2006, a costa de reducir la potencia y prestaciones. Es una de las fórmulas para abaratar los costes –de 30 a 1,6 millones de dólares– que pagan los equipos a sus respectivos motorizadores. Pensando en los equipos modestos, la FIA ha dado la opción, los viernes de Gran Premio, de dos horas extra para los equipos que no hayan podido efectuar pruebas en invierno, a fin de compensar las diferencias de medios. Así, Jaguar, Jordan y Minardi se han acogido a esta opción. Además, el tradicional warm up de la mañana del domingo se suprime para adecuarse a la política de mínimas modificaciones mecánicas, y a la ausencia de repostaje entre calificación y carrera. Otra de las grandes novedades es que el muleto o coche de reserva sólo podrá ser utilizado en caso de avería irreparable, y en tal caso, saldrá desde la zona de asistencias. También se limitan los neumáticos: Bridgestone y Michelin sólo podrán suministrar dos compuestos de seco y uno de mojado a cada escudería. Para evitar órdenes de equipo, la FIA tendrá acceso a todas las conversaciones entre los boxes de cada equipo y sus pilotos. También se limita la telemetría bidireccional, con la que los técnicos podían operar directamente en la mecánica y gestión del coche a través de 300 sensores distribuidos en el monoplaza. Este año se elimina y sólo servirá para tomar datos a posteriori. Por último, cambia la puntuación para favorecer la regularidad, en lugar de las victorias. Ahora puntúan los ocho primeros: 10 puntos para el vencedor, ocho para el segundo, cinco para el tercero y cuatro, tres, dos y uno, respectivamente, para los siguientes. También se ven beneficiados los equipos pequeños para puntuar.