Esta web contiene cookies. Al navegar acepta su uso conforme a la legislación vigente Más Información
Sorry, your browser does not support inline SVG

DEBATE SOBRE IRAK

Aznar, tachado en el Congreso de sumiso a EE.UU

Fotografía Aznar, en su comparecencia en el Congreso de los Diputados

Aznar, en su comparecencia en el Congreso de los Diputados

Por Raquel TeresaTiempo de lectura2 min
España05-02-2003

La semana comenzaba con los resultados, nulos, de la reunión que mantuvo con el líder socialista. Un encuentro que hacía más de cinco meses que no se repetía. El presidente ofrecía información diaria y un papel en las resoluciones parlamentarias a cambio de consenso pero ni siquiera en eso estuvieron de acuerdo. Mientras Aznar intentaba "por tres veces" convencerle, José Luis Rodríguez Zapatero le dijo "tres veces que no lo veía". Según el PSOE, lo que solicitó el presidente fue "un apoyo incondicional a Bush".

Una vez en el Congreso, durante el debate sobre la situación de Irak, el discurso de Zapatero repetía las mismas ideas: "La única evidencia es que ustedes son un papel instrumental en una estrategia que sólo define el Gobierno del señor Bush". Afianzaba su postura en una oposición por principios al uso injustificado de la fuerza y no una oposición sistemática al Gobierno, destacando sobre todo la poca certeza de la existencia o la ubicación de las armas de destrucción masiva de cuya pertenencia se acusa a Sadam Hussein. También aseguraba que, en el caso de ser él el presidente del Gobierno, sus palabras serían las mismas y pedía al presidente que no apoye la guerra en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas. Gaspar Llamazares e Izquierda Unida no se distanciaba en su intervención. Acusaba a Aznar de más lealtad a la política de los Estados Unidos que a las resoluciones del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas y destacaba la incongruencia y la inmoralidad de "utilizar armas de destrucción masiva para destruir armas de destrucción masiva en Irak; provocar nuevos desequilibrios en Oriente Medio para evitar desequilibrios como los que hoy hay en Oriente Medio y provocar más terrorismo en el mundo para acabar con el terrorismo". "Ustedes no podrán evitar que la gran mayoría de los ciudadanos siga diciendo no a la guerra, sí a la paz y sigan considerando que el Gobierno Aznar es el Gobierno delegado de los Estados Unidos y no el Gobierno democrático de los españoles". Antes de que Aznar interviniera, ya se había criticado que sus palabras no tendrían el mismo peso que las demás. Por el formato del debate, el presidente tuvo más tiempo para explicarse. Según Aznar, el Gobierno sigue trabajando por la paz y la seguridad, las cuales se garantizan mediante el respeto y el cumplimiento de las Resoluciones del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas. Sin el cumplimiento de éstas, la paz está amenazada y España quiere intervenir activamente ante este ataque que es el terrorismo, especialmente si tiene a su alcance medios de destrucción masiva. Y destacó una vez más: "La crisis es consecuencia del reiterado incumplimiento, por parte de Irak, de sus obligaciones internacionales y de las Resoluciones del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas".