TEMPORAL
El temporal de viento y lluvia acaba con la vida de cinco personas
Por Fernando Cancio Martínez
2 min
Sociedad14-11-2002
El temporal que azotó la Península Ibérica la pasada semana ha dejado detrás de sí cuantiosos daños materiales, pero también, varias víctimas mortales. Dos grúas de construcción acabaron con la vida de tres personas el jueves de la semana pasada y un día después morían otras dos en un suceso similar.
El primer accidente tuvo lugar en Santurce (Bilbao), donde el fuerte viento que soplaba derrumbó una grúa. Esta cayó directamente sobre el quinto piso de un edificio cercano y aplastó a una mujer embarazada que se encontraba en la casa. Su marido fue también alcanzado pero sólo sufre heridas y alguna rotura. El otro incidente se registró una hora después en La Coruña, donde otra grúa pesada caía y mataba a dos ancianas en su domicilio. La fuerza con la que cayó en esta ocasión hizo que los cuerpos apareciesen en un callejón contiguo. Estas no son las únicas víctimas mortales que se ha cobrado el temporal. Al día siguiente fallecían en Cádiz dos marineros del buque Príncipe de Asturias. El fuerte viento hizo que una de las grúas de carga del barco empujase la pasarela por la que cruzaban y cayesen al dique seco. Otro marinero también fue alcanzado pero logró salvar su vida. El temporal ha pasado por numerosas ciudades españolas provocando cuantiosos daños materiales. En Cádiz se avistaron varios tornados y se contabilizaron rachas de viento de 135 kilómetros por hora en Rota, El Puerto de Santa María y Bornos. En Ceuta, caía el muro de un centro de menores por la fuerza con la que llegaba el viento, sin causar daños personales esta vez. También el norte sufrió las consecuencias del temporal. En Asturias se pedía precaución a los conductores y peatones por la posibilidad de caída de árboles y objetos. En Galicia, en concreto en el Parlamento de Santiago de Compostela, aparecieron goteras y se registraron apagones durante una sesión plenaria. Varios vuelos tuvieron que ser cancelados o retrasados por el temporal, las comunicaciones en la zona del Estrecho se vieron afectadas y la nieve hizo acto de presencia en Sierra Nevada, Segovia, Ávila o Lérida donde, además de precaución, se exigía el uso de cadenas para circular. Desde Asaja-Cádiz se pidió al Gobierno que la zona fuese declarada catastrófica por los daños provocados por el agua y el viento.