Salud
El tabaco: una amenaza para el desarrollo, según la OMS
Por Javier Álvarez Lago2 min
Sociedad30-05-2017
El 30 de mayo es el Día Mundial Sin Tabaco. La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha escogido esta fecha para publicar un informe en el que advierte que esta práctica es contraria al desarrollo sostenible, pues dificulta alcanzar sus objetivos. Así, recuerda a más de 180 países (entre ellos todos los pertenecientes a la UE) que están internacionalmente obligados a luchar por reducir, de cara a erradicarlo en el futuro, este hábito, por el que mueren más de 7 millones de personas al año.
En total, el tabaco es el causante directo del 12% de las muertes de la población adulta mundial. Pero el tabaco no solo mata a quien lo fuma. De estas 7 millones de defunciones, más de 600.000 se deben a la inhalación pasiva de su humo. Es, asimismo, uno de los principales factores de riesgo de cara a contraer enfermedades no transmisibles tan graves como pueden ser el cáncer o las cardiopatías. Partiendo de la base de que fuman alrededor de 900.000 personas al día, a nadie ha de extrañar, por lo tanto, que a su causa se deba el 5,7% del gasto sanitario mundial.
Por su parte, la OMS ha querido remarcar que estas pérdidas humanas se traducen en pérdidas económicas, pues los países ven disminuida su productividad. Su habito provoca también problemas económicos a las familias, situación que se agrava en los países con menos recursos económicos, donde se registran alrededor del 80% de las muertes debidas al tabaco. Para su adquisición, por otra parte, las familias gastan en estos países el 10% de su renta. Por ello, la OMS no duda de hablar del tabaquismo como de una "epidemia" que dificulta el logro de los objetivos de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible. Sin embargo, en esta ocasión, la OMS ha decidido centrarse en los impactos que este negocio tiene sobre el medio ambiente.
Y es que el humo del tabaco, por contener sustancias tóxicas y de efecto invernadero, produce externalidades negativas en la atmosfera y en el medio ambiente. Su residuo, la colilla, aparece tirada en prácticamente cualquier lugar del planeta. Por su parte, a su cultivo se considera responsable de cerca del 4% de la deforestación del planeta, mientras que su producción produce toneladas de residuos sólidos al año.
Por todo esto, la OMS recuerda a los gobiernos que están obligados (a raíz de la entrada en vigor del Convenio Marco de la OMS para el Control del Tabaco en 2005) a luchar contra esta práctica. Para ello, les recuerda las principales medidas que tienen a su disposición: la prohibición de la publicidad del producto; la implantación de un empaquetado neutro que advierta al consumidor sobre los riesgos asociados a su consumo; la prohibición de fumar en los espacios públicos: la posibilidad de aumentar los impuestos especiales sobre su compra... A este respecto, cabe destacar que los gobiernos recaudan por esta vía en la actualidad unos 270 000 millones de dolares. La OMS, como es habitual, recomienda que se estos sigan aumentado, con el objetivo de utilizar estos ingresos para subsanar los costes asociados a su consumo.