ORIENTE PROXIMO
Una incursión israelí deja 14 muertos en un campo de refugiados
Un palestino se manifiesta en lo alto de un edificio con un cartel de Yasir Arafat
Por Eva Pozueco Turabián
1 min
Internacional08-10-2002
Una franja, la de Gaza, y disparos que la cruzan silbando de uno u otro lado según el turno. En esta ocasión fue el Ejército israelí quien empuñó las armas y centenares de soldados iniciaron una ofensiva en el campo de refugiados palestinos de Yan Yunés con el fin de "castigar" a presuntos terrorista.
El Ejército de Israel se sirvió de helicópteros y carros de combate para irrumpir durante la madrugada del pasado martes y dar un escarmiento a uno de los sectores más marginales de Gaza. Según fuentes israelíes, en esta zona es donde más adeptos captaban los radicales de Hamás para colaborar en atentados terroristas. Aún así, las tropas de Israel no midieron el poder desmesurado de sus armas ya que la cifra de muertos y heridos que dejaron a su paso fue escalofriante: 14 palestinos perdieron la vida y los heridos se cuentan por centenas. Los palestinos que sobrevivieron a la masacre aseguran que estaban aterrorizados ante tal derroche de balas y metralla. Israel justificó el ataque y lo calificó de necesario. El general Ziv, jefe de las fuerzas israelíes, intentó apaciguar la indignación de los palestinos y de los pacifistas de su propio país al argumentar que el ataque pretendía terminar con las infraestructuras terroristas. Ziv también lamentó las muertes producidas durante el ataque pero concluyó confesando que lo que realmente existe entre Palestina e Israel es una guerra no declarada. A estas afirmaciones se sumó el propio Ariel Sharon, primer ministro israelí, calificando la operación antiterrorista de altamente exitosa y necesaria para salvaguardar la seguridad de la población de Israel.