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CRISIS EN UPyD

UPyD sobrevive con gestoras en tres Comunidades desde las elecciones andaluzas

Por Jesús Espinosa Tiempo de lectura3 min
España09-04-2015

Las elecciones andaluzas, o mejor dicho, el batacazo de UPyD en las elecciones andaluzas ha terminado por romper el partido en mil pedazos. Aún liderado por Rosa Diez, no consiguió representación en el Parlamento andaluz y varios dirigentes pidieron entonces la dimisión de la cúpula del partido. Sin embargo, Díez se aferra al poder y no piensa dimitir. La situación, por otra parte, es tan delicada que la cúpula se ha visto obligada a convocar un Congreso extraordinario en junio para decidir el futuro de los magenta.

UPyD se podría ver como un partido que ha luchado contra la corrupción, que con sus querellas ha iniciado, por ejemplo, el proceso judicial de las tarjetas Black de Caja Madrid pero que está lastrado por los problemas de los viejos partidos. La casa de UPyD ya está empezando a perder, incluso, el tejado. Es cuestión de tiempo saber si Díez será capaz de reconducir esta situación y, al menos, dejar intactos los cimientos.

Tras las elecciones andaluzas, un marte, amanecía el partido con la renuncia del actor y diputado Toni Cantó a su escaño en la Carrera de San Jerónimo. Tampoco irá como candidato a la Generalitat y, tras el Congreso Extraordinario de junio, decidirá si sigue militando. Es sorprendente el contraste porque hace apenas unas semanas, ayudaba al candidato andaluz, Martín de la Herrán, en acciones como pasar la bayeta "contra la corrupción" por la fachada de la Delegación del Gobierno andaluz en Málaga.

Avanzaba la jornada y el candidato a la alcaldía de Sevilla, Eladio García de la Borbolla, confirmaba su renuncia a encabezar el proyecto magenta en la capital hispalense. "Unas elecciones se pueden ganar y perder, eso nunca me ha importado, pero lo que sí que me parece importante es la respuesta de nuestros dirigentes", apuntaba, al tiempo que lamentaba que la dirección no haciera nada para evitar la crisis también suscitada en Málaga.

Esa crisis sevillana se unió a la de Málaga que en plena Semana Santa dimitía en bloque. Sin embargo, en estos momentos, el candidato en la capital Costa del Sol, Marcos Paz, trata de confeccionar su lista y prefiere mantenerse al margen de polémicas y tormentas.

Es sorprende porque en la campaña andaluza Díez participó muy activamente. Fue probablemente la líder nacional que más acudió a Andalucía. Curiosamente, la noche antes de las elecciones, anunciaba que no seguiría el cierre de campaña desde Málaga "por motivos personales".

En Málaga, Carlos Hernández, responsable de Política Municipal y Programa, es uno de los miembros de la directiva malagueña que dio de baja su cargo en las filas de UPyD, donde continuará como mero afiliado, al igual que Cantí. Aseguraba que estas autonómicas habían sido el "detonante", pero que el partido arrastraba ya problemas internos que no se han solucionado y no se han llevado a cabo los "cambios necesarios". "No ha habido esa autocrítica, me siento decepcionado y he perdido la confianza", apunta Hernández, para quien los "principios están por encima de la política".

Otra curiosidad es que UPyD, desde fuera del Parlamento andaluz, es el partido que más ha acudido a los tribunales para denunciar casos de corrupción en la Junta de Andalucía. Vistos los resultados, queda claro que ni las irregularidades pueden restar votos ni las acciones contra ellas los suman. "La única oposición que se ha hecho en Andalucía la ha hecho UPyD desde fuera del Parlamento. Nosotros hemos llevado a la Junta a los tribunales, cosa que no ha hecho el PP. Nos hemos personado en el caso ERE, en el Edu, hemos denunciado a la cúpula de Caja Granada, a la Diputación de Huelva... ", afirmaba el que fuera candidato de UPyD a Andalucía, Martín de la Herrán. Y no le falta razón.

Ahora todos los ojos están puestos en el Congreso Extraordinario de Junio y en el paso al frente de Irene Lozano para presentarse a liderar el partido. Por ahora, UPyD sobrevive con gestoras en Andalucía, Asturias y Castilla y León. Una situación insostenible que ha provocado que se escuchen voces que dicen que Rosa Díez podría tener decidido abandonar el partido en dicho Congreso, pero ella no lo ha confirmado públicamente.