VENEZUELA
Las cárceles venezolanas se llenan de presos políticos opositores al Gobierno
Por Jesús Espinosa 
3 min
Internacional13-03-2015
Las cárceles venezolanas últimamente se están llenando de políticos, todos opositores al Gobierno venezolano y con acusaciones un tanto dudosas. El último en caer fue el alcalde de Caracas, Antonio Ledezma, detenido supuestamente por orquestar un golpe de Estado solo por publicar una reflexión en un periódico del país. Pero esto no se queda ahí, también un grupo de jóvenes permanecen en las cárceles del país única y exclusivamente por acudir a una manifestación contra el Gobierno de Nicolás Maduro.
Antonio Ledezma es el alcalde de Caracas y fue detenido por agentes del servicio de inteligencia de Venezuela el pasado jueves 20 de febrero. El presidente del Gobierno venezolano, Nicolás Maduro, confirmó su detención horas después en la cadena nacional de radio y televisión. El mandatario le atribuye al alcalde el estar detrás de un “golpe de Estado”, que se habría iniciado a partir de un artículo publicado por el político en el diario El Nacional titulado “Llamado a los venezolanos a un acuerdo nacional de transición”.
En ese sentido, la Fiscalía del país confirmó un día después lo que ya adelantó el presidente, que presentaría contra Ledezma por estar vinculado con una trama conspiratoria que tenía por objetivo derrocar al Gobierno de Nicolás Maduro.
Por su parte, el opositor al Gobierno venezolano, Leopoldo López, ha cumplido ya un año en la cárcel. Se entregó él mismo el 18 de febrero del 2014. Una detención convertida en un show porque la policía introdujo al político en un coche ante miles de seguidores del, por entonces, recientemente detenido. Lo cierto es que pesaba una orden de captura sobre López por los incidentes del pasado miércoles al término de una marcha en la que hubo tres muertos.
Antes de entregarse, el opositor señaló que en Venezuela lo que hay es una “justicia injusta y corrupta” y advirtió de que no iba a pasar a la clandestinidad ni a dejar su país. “Si mi encarcelamiento vale para el despertar de un pueblo, para que Venezuela despierte definitivamente y que la mayoría de los venezolanos que queremos cambio podamos construir ese cambio en paz y en democracia, entonces vale este encarcelamiento infame”, indicó, acusando al presidente, Nicolás Maduro.
Después, el alcalde de San Cristóbal, Daniel Cebellos, bajo las sospechas de “rebelión civil” también fue detenido por la policía venezolana el 20 de marzo de 2014. Está acusado de fomentar la violencia en uno de los principales focos de las protestas del año pasado contra el Gobierno del país.
El ministro del Interior, Miguel Rodríguez Torres, dijo a la televisión estatal que Daniel Ceballos fue arrestado por agentes del Servicio Bolivariano de Inteligencia cumpliendo una orden de un tribunal del estado occidental de Táchira.
Por último, un grupo de jóvenes estudiantes que protestaban en las calles de Venezuela contra el Gobierno fueron detenidos y enviados a distintos centros penitenciarios y lejos de sus lugares de origen para dificultar a sus familiares que les visiten. Unas cárceles, por otro lado, que están descritas por ONGs como las más peligrosas de toda América Latina.
Restricciones en la compra de ciertos productos por desabastecimiento
El país venezolano está sumida en un profundo desabastecimiento en los productos debido, entre otros motivos, a la inflación. En los supermercados ya no se puede conseguir papel higiénico ni pasta de dientes, por ejemplo. Además, para algunas marcas, como el desodorante, hay restricciones en cuanto al número de productos que se pueden adquirir.
Carmen Duarte es de San Cristóbal y en testimonios recogidos por los medios locales venezolanos admite: "En mi casa somos cinco personas: mi esposo, mis tres hijos y yo. Por más que le expliqué a la cajera que necesitaba un desodorante para cada uno me dijo que sólo podía llevar dos. Por más que seamos familia son artículos de aseo personal”.
De acuerdo con el gobierno, la actual emergencia se debe a un “sabotaje económico y la especulación” promovidos por la oposición en alianza con la empresa privada con el fin de derrocar al presidente Maduro. El dedo acusador del gobernante apuntó pronto a Lorenzo Mendoza, el presidente del Grupo Polar, un importante consorcio productor y distribuidor de alimentos y bebidas, que entre otras marcas, vende la conocida Harina Pan (harida de maíz precocida).
Fue el propio Mendoza quien aclaró que la empresa trabaja al 100% de la producción, que sólo satisface a 48% del mercado mientras el resto queda por cuenta del Estado y que cada paso de sus operaciones, desde la compra de materias primas hasta la colocación de los productos en las estanterías, está controlado por el Gobierno.