Crimen Organizado
Desarticulan una red de proxenetismo activa desde 1999
Por Desiree Panadero2 min
Sociedad18-02-2015
Desmantelan una banda de explotación sexual 16 años después. Se han liberado una docena de mujeres. Entre las afectadas hay una adolescente de 15 años y otra que vino a España con 17 en el año 2010. Además, se han realizado cinco redadas en las que se han hallado: dinero en efectivo, 25 móviles, dispositivos informáticos, documentación falsa, un gran equipo de instrumentos de vudú y un álbum con fotografías de las víctimas.
Además, han sido detenidas siete personas, cuatro de ellas en la capital, otras dos en Tarragona y otra en La Coruña. Esta investigación comenzaba hace medio año, en el mes de julio, cuando se conseguía información gracias al desmantelamiento de otra organización parecida. En aquella ocasión, se liberó a cuatro personas y otras diez fueron detenidas. Se ha podido comprobar que esta red disponía de numerosos recursos logísticos y estructurales para su fin en Madrid, Córdoba, Málaga, Tarragona, La Coruña y Suiza, donde las mujeres eran explotadas sexualmente en locales de alterne.
La Policía asegura que el cabecilla de la organización tenía establecido su centro de mando en un domicilio ubicado en el barrio madrileño de Moratalaz.
Este hombre que realizaba múltiples viajes al año a Nigeria, donde realizaba secuestros de mujeres jóvenes mediante falsas ofertas de trabajo en Europa o, en el caso de ser menores de edad, para estudiar en España. Una vez que aceptaban la oferta de viajar al Viejo Continente, eran obligadas a firmar un contrato o a practicar un ritual vudú, donde se comprometían a ser siempre obedientes, a devolver el dinero que costara su viaje y sobre todo a no acudir nunca a la Policía para denunciar su situación. Después de ser sometidas al ritual en Nigeria, llegaba el momento de ser documentadas, siendo trasladadas para este fin a domicilios de Lagos (Nigeria), donde les entregaban un pasaporte y visado falsos de otra mujer que se pareciese a ellas, manteniéndolas en dicho lugar hasta su traslado a España. Tras su llegada a Madrid eran recogidas en el aeropuerto por uno de los hombres de mayor confianza del jefe de la red, el cual les retiraba su pasaporte y se encargaba de darles alojamiento. Después de unos días, eran informadas de que deberían ejercer la prostitución hasta saldar la deuda contraída con cantidades que oscilaban entre los 45.000 y 60.000 euros como concepto de traslado, una deuda que crecía con el alquiler de las habitaciones y con otros gastos como la luz, el agua y la manutención. La delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes, el jefe Superior de Policía, Alfonso Fernández Díez, y el comisario segundo jefe de la Unidad contra las Redes de Inmigración y Falsedad Documental (UCRIF) de Madrid, Santos Catalina han sido los encargados de informar de la operación este miércoles, en rueda de prensa.
Tras efectuar las detenciones y llevar a cabo los registros oportunos, los agentes también han encontrado una agenda de contabilidad con los cobros realizados a sus víctimas. “Hoy tenemos el decoro de presentar la última operación policial llevada a cabo por la trata de seres humanos; la trata de mujeres con fines de explotación sexual”, así comenzaba la rueda de prensa Cifuentes, para después asegurar: “La lucha contra la esclavitud y esta es una forma, sin duda, de esclavitud humana es una de las prioridades de la Delegación de Gobierno”.