PRESUPUESTOS GENERALES
El Gobierno destina más ayuda a las comunidades autónomas
Por Pablo Romero2 min
Economía03-04-2012
Las transferencias del Estado a las comunidades autónomas en 2012 aumentarán un 9,7 por ciento con respecto al año anterior y alcanzarán los 27.734 millones de euros, según el proyecto de Presupuestos Generales del Estado.
Asimismo, el Gobierno ha previsto que el importe de las transferencias a las entidades locales ascienda hasta los 15.315 millones de euros, un 7,6 por ciento más que en 2011. Con todo, la financiación de los entes territoriales (comunidades autónomas y entidades locales) a través de las transferencias estatales ascenderá a 43.050 millones de euros, lo que supondrá un aumento del 8,9 por ciento. En cuanto al Fondo de Garantía, que tiene el objetivo de garantizar que todas las comunidades autónomas reciben los mismos recursos por habitante para financiar los servicios públicos fundamentales, el Gobierno contempla una aportación adicional a la financiación procedente de los impuestos cedidos a las CC.AA. de 6.801 millones de euros para 2012. El Fondo de Suficiencia, mecanismo para cubrir la diferencia entre la necesidad de financiación de cada autonomía y la suma entre su capacidad tributaria y el fondo de garantía que recibe, estará dotado con 7.677 millones de euros. En concreto, por orden de más a menos, Cataluña recibirá el 22,84 por ciento del Fondo de Suficiencia (1.753 millones), Andalucía, el 19,35, Galicia, el 11,22(861 millones); Castilla y León, Extremadura, Cantabria, Aragón, Castilla-La Mancha y Madrid, percibirán por debajo del 10 por ciento y menos del 5 por cada cien Canarias, Asturias, La Rioja, y Murcia (0,59%). Las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla tienen su propio Fondo de Suficiencia, dotado de 47,19 euros, de los cuales el 55,54 por ciento ha sido asignado a Ceuta y el 44,46 a Melilla. En relación a la partida de gastos financieros, aumentará un 5,3 por ciento hasta los 28.876,03 millones de euros. El Ejecutivo cree que el incremento es "consecuencia de la evolución de la deuda pública española y las condiciones de los mercados financieros" y tiene el fin de emitir más deuda. El esfuerzo de consolidación, definido por el propio Gobierno como el mayor realizado en democracia, conlleva un recorte del gasto de los Ministerios del 16,9 por ciento y fuertes tijeretazos en partidas como Cooperación o Fomento, así como aumento de impuestos. Entre sus puntos más controvertidos, el Ejecutivo pondrá en marcha una amnistía fiscal con vistas a aflorar unos 25.000 millones que ahora están en paraísos fiscales o que circulan por la economía sumergida. El objetivo es recaudar 2.500 millones, ya que estos fondos estarán penalizados con un gravamen único del 10 por ciento. Por culpa de la crisis, la partida de intereses se consolida como la segunda en importancia de las cuentas del Estado por detrás de la del paro. El Gobierno espera que al adquirir liquidez podrán recaudar más dinero lo que ayudará a equilibrar las cuentas en mayor cantidad.