OPEN DE AUSTRALIA
Rafael Nadal pierde la final ante Novak Djokovic
Por Pedro Ferrera
2 min
Deportes29-01-2012
Los ostensibles gestos de fatiga física de Novak Djokovic en los instantes iniciales hicieron presagiar una posible victoria de un Rafa Nadal crecido ante la adversidad de haber caído derrotado en las últimas seis finales disputadas ante el vigente número uno del mundo. Sin embargo, el de Belgrado fue de menos a más y venció al español en prácticamente seis horas de partido.
El tenis inteligente y agresivo desplegado por Nadal en el primer set de la final y que le permitió dar el primer paso hacia la consecución del título al ganar por cinco juegos a siete, se diluyó con el paso de los minutos ante un Nole que sufrió las acometidas del manacorense. Sin embargo, se repuso y venció el segundo por seis juegos a cuatro evitando el intento de remontada de un Rafa que llegó a ir perdiendo por cuatro a uno en los 66 minutos que duró la segunda manga. Con la extrema igualdad reflejada en el marcador, transcurrieron unos minutos en los que los intercambios de golpes mermaron a Nadal y propiciaron que cediera la iniciativa ante la evidente mejoría física y mental del serbio. El balear, excesivamente situado en el fondo de la pista, renegó a castigar con la derecha paralela a Djokovic, tal y como había hecho en la primera manga, a lo que se sumó el aumento en el número de imprecisiones en el resto. Esto animó a Nole a desplegar su mejor versión y con dos roturas de saque e igual número de juegos en blanco se embolsó el tercer set por un cómodo seis a dos. A partir de aquí, Nadal se aferró a la garra física y el coraje psicológico del que suele hacer gala en la pista en los momentos más difíciles y luchó hasta el final para revertir la situación. Ni los puntos inverosímiles de Djokovic, ni el breve descanso por lluvia que obligó a la organización a detener el encuentro para secar la Rod Laver Arena de Melbourne con cuatro a cuatro en el electrónico, le impidieron ganar el cuarto set en un intenso desempate que acabó llevándose por seis juegos a siete (5-7 en el tie break). Con todo por decidir en la quinta y definitiva manga, resurgió el Nadal de las mejores ocasiones, pero cuando parecía que tenía todo a su favor para conseguir su undécimo Grand Slam (de diecisiete posibles) se le escapó un posible tres a cinco. Al final, victoria y título por siete a cinco para Djokovic en una épica final con sendos tenistas brindando un gran espectáculo deportivo cargado de igualdad, emoción y valentía.