ELECCIONES GENERALES

Rubalcaba y Rajoy exprimen al máximo su último día de campaña electoral

Por Pablo Romero2 min

España19-11-2011

Rubalcaba suplicó el voto a aquellos que confiaron en su partido en el 2008 y ahora descontentos con la actuación de su Gobierno ante la crisis están indecisos. El socialista pretende al menos lograr un resultado digno en las elecciones de este domingo. Por su parte, Rajoy, con la confianza de quien ya se ve ganador, siguió sin responder a las numerosas preguntas en forma de ataques que el PSOE le presentó durante estos 15 días de campaña.

Hay que destacar el esfuerzo de Rubalcaba en esta campaña. Ha hecho desde macro-actos con miles de personas, a mini-mítines por pequeños pueblos hasta llegar al punto final, el municipio madrileño de Fuenlabrada. Se desgañitó pidiendo a sus seguidores que hagan de predicadores de su programa "El voto que tenemos que ganar es el de gente que nos ha acompañado durante mucho tiempo y ahora está en casa, no va a venir a vernos. Por tanto, os pido que vayáis y les expliquéis que hemos sido los socialistas los que hemos hecho lo que la derecha se quiere llevar por delante". Rajoy, acompañado por primera vez en la campaña por el ex-presidente, José María Aznar, asimismo por sus principales valedores dentro del PP como Esperanza Aguirre, Dolores de Cospedal, Alberto Ruíz Gallardón, Ana Mato, Soraya Sáenz de Santamaría, entre otros. Mostró seguridad y confianza en que "si se hace un trabajo,serio y responsable, seguro que España vuelve al lugar que estuvo y que le corresponde". Rajoy aseguró que si logra la victoria se guiará únicamente por "el interés general de los españoles". Y añadió que "habrá un Gobierno que se va a ganar la confianza de los españoles porque va a estar a la altura". La campaña cierra dos semanas de duro trabajo por toda España en las que los principales candidatos realizaron un gran número de mitines. Rubalcaba, solamente acompañado por el actual presidente José Luis Rodríguez Zapatero en un acto, se centró en explicar su programa y pedir el voto de los indecisos. Mientras que Rajoy, tras dos derrotas consecutivas en las anteriores elecciones, se ve arropado por su partido y confía en la victoria porque es la única forma de lograr una "recuperación nacional" que sitúe a España en el lugar que le corresponde. Consciente de su ventaja no entró en la guerra dialéctica con Rubalcaba.