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CONFLICTO

EEUU ratifica que Odissey devuelva 'Las Mercedes' a España

Por Miguel de MesaTiempo de lectura1 min
Cultura23-09-2011

El tribunal de apelación de Atlanta, Georgia (EEUU) ha ratificado que la empresa Odissey Marine exploration, que se dedica a cazar tesoros marinos, debe entregar a España las 600.000 monedas de plata y oro que sustrajo del barco Nuestra señora Las Mercedes en el 2007.

En el documento, que constaba de 60 páginas, ratifica así la decisión de un tribunal federal del 22 de diciembre del 2009, que concedió a España el tesoro sustraido de la antigua fragata hundido en la batalla del cabo de Santa María (1804). En la ratificación se aclara, además de otros puntos, la firma de un tratado en 1902 entre EEUU y España que garantiza la propiedad española de la carga del barco hundido. Por otra parte, la empresa Odissey ha declarado que solicitará de nuevo ante el tribunal de apelaciones en pleno para volver a exponer sus argumentos. Si se produce una resolución, la empresa llevará el caso al tribunal supremo de EEUU, aunque algunos juristas dicen que no hay ninguna garantía de que llegue al supremo ya que llegan muchos al año y sólo son seleccionados un porcentaje minoritario de los casos. "Estamos defraudados por la decisión del tribuna", señala Melinda MacConnel, vicepresidenta de Odyssey. "Creemos que la Constitución de EEUU y todas las demás leyes aplicables otorgan jurisdicción a los tribunales estadounidenses para determinar los derecho de Odyssey, España y los otros demandantes en este caso" añade, antes de señalar que la decisión "contradice otras sentencias del propio tribunal y del Supremo". Además el Gobierno peruano también se ha unido a esta batalla legal en los Estados Unidos por las monedas ya que, asegura, fueron hundidas allí cuando Perú era una colonia española. No obstante el tribunal también ha rechazado sus declaciones. De igual manera, ha negado los argumentos de los de los 25 descendientes de la tripulación del antiguo barco (que en el momento de hundirse estaba formada por unas 300 personas, de las que 51 sobrevivieron).