ARQUEOLOGIA
Los incas resistieron a la conquista española en el suroeste de Perú
Por La Semana1 min
Sociedad19-03-2002
A vista de pájaro, en lo alto del monte Victoria, se encuentra el último tesoro descubierto de la cultura inca. Es un mosaico compuesto por infinidad de piezas -viviendas de planta circular, graneros, construcciones funerarias, calzadas, una presa y una pirámide truncada- que juntas desvelarán más datos para la historia.
Según las investigaciones llevadas a cabo por una expedición patrocinada por la Fundación National Geographic, este reciente descubrimiento es la última fortaleza de los incas. Allí resistieron a la conquista de los españoles hasta 1572, en unas montañas al suroeste de Perú, a unos 35 kilómetros del famoso Machu Pichu. El paso del tiempo ha respetado las ruinas de esta ciudad, donde se ha encontrado más de cien estructuras y muchas piezas que poco a poco van a desvelar más secretos de la cultura inca. La ubicación de estas ruinas ya se conocía desde 1999, cuando dos arqueólogos, el británico Peter Frost y el estadounidense Scott Gorsuch, vieron construcciones en lo alto de esta montaña. Sin embargo, la sorpresa de la gran cantidad de datos que se puede obtener sobre el terreno ha tenido que esperar a que varios investigadores accediesen a la alta ubicación de los restos arqueológicos, porque la vista no alcanzaba a observar con detalle. Después de cuatro días de caminata para ascender hasta los 6.000 metros de altura, los arqueólogos lograron subir al complejo el año pasado. A partir de ese momento, comenzaron las investigaciones de forma más exhaustiva. Lo que allí se ha encontrado deja muestras de haber sufrido saqueos. De todos modos, los seis kilómetros cuadrados de extensión dejan muchas pruebas de los incas, de su forma de vida, de su cultura y de su historia. Por ejemplo, la cerámica descubierta en este emplazamiento es uno de los hallazgos más novedosos.