TEATRO

Un homenaje a Marsillach y Alberti

Por José Luis Carreras López1 min

Cultura21-03-2002

El Día Mundial del Teatro sirvió este año para homenajear a dos expertos de este género: Adolfo Marsillach y Rafael Alberti. El primero de ellos, fallecido recientemente, dirigió durante más de una década la Compañía Nacional de Teatro Clásico.

Los miembros de la profesión se dieron cita el martes pasado en el Teatro la Comedia de Madrid. Andrés Amorós, director del Instituto Nacional de Artes Escénicas; Santiago Mancada, vicepresidente teatral de la Sociedad General de Autores Españoles (SGAE); y José Luis Alonso de Santos, director de la Compañía Nacional de Teatro Clásico, hicieron las veces de anfitriones y escucharon el manifiesto en defensa del teatro. La encargada de leer el manifiesto fue esta vez Blanca Marsillach, hija del desaparecido dramaturgo, quien leyó un texto escrito por Girish Karnad. Acto seguido, la fiesta continuó con la lectura dramatizada de varias piezas cortas de Enrique Jardiel Poncela -del que se cumple el centenario de su nacimiento- como Las fases del amor, El pecado de Doña Clara o Cómo contesta el eco. En la presente edición del Día Mundial del Teatro se respira un ambiente de satisfacción y alegría. Los datos ofrecidos por la SGAE reflejan un crecimiento de casi un nueve por ciento de asistencia a las salas. El estudio dice que los ciudadanos que más asisten a los teatros son los madrileños, seguidos por los catalanes y los valencianos. En cuanto al teatro español que más asistentes albergó se encuentra el madrileño Lope de Vega, con 198.000 espectadores. La primera sala no madrileña que la sigue es la valenciana Olympia. El crecimiento en el sector también se percibe en el número de representaciones y en la recaudación en taquilla. Sin embargo, no hay que olvidar algún dato negativo para los lectores aficionados a las artes escénicas: sube el precio medio de las entradas.