REACCIONES A LA SENTENCIA DEL TC
Los nacionalistas no se ponen de acuerdo sobre el estatuto en el Congreso de los Diputados
Por Esteban del Pozo1 min
España22-07-2010
Lo que sí pudieron hacer en el Parlamento catalán no lo lograron en el Congreso de los Diputados. Esto es lo que les sucedió a los partidos nacionalistas y separaristas de Cataluña, que a pesar de todas sus diferencias, en la Cámara catalana sí se pusieron de acuerdo en pedir a la Cámara Baja española que Cataluña es una nación. Sin embargo en el Congreso defendieron propuestas diferentes que no se atrevieron a apoyar conjuntamente.
Esto se ha producido por la división existente entre las fuerzas políticas de Cataluña. Así se ha impedido que el pleno del Congreso se pronunciara sobre el Estatut de Cataluña y la sentencia del Tribunal Constitucional que recorta algunos preceptos, pese a que había hasta seis propuestas de resolución que hacían referencia el texto estatutario catalán. Las seis peticiones diferentes se deben a los diferentes partidos separatistas que catalanes existentes y la necesidad de querer impulsar las particulares para luego presentaralas ante su electorado como referente catalanista. Salvo el PSC, las fuerzas políticas que hace tres días apoyaron una declaración de mínimos en el Parlament, ERC, ICV y CiU, habían pactado una enmienda para que el Congreso respaldase el documento del Parlament, donde se transcribe el preámbulo del Estatut, que definió a Cataluña como nación. Esta iniciativa a la que finalmente no ha querido adherirse el PSOE, ha colocado, a juicio del resto de fuerzas políticas, a los socialistas catalanes en una posición incómoda y contradictoria. Esto ha provocado que, para que el sector independentista catalán no dejase de votar en masa al PSC, la reunión entre Montilla y Zapatero fue muy benévola y generosa con el líder del PSC. Sin embargo, en el caso concreto del Congreso, los socialistas catalanes han justificado su voto contrario a esas propuestas excusándose en que la resolución del PSOE era más completa y más ambiciosa, pues iba más allá de la mera reproducción del preámbulo del Estatut para proponer una salida al conflicto generado tras la sentencia del Constitucional. Incluso tampoco han podido mantener la unidad entre las fuerzas que se definen como catalanistas, habida cuenta de que ICV se ha abstenido en la votación de la propuesta del PSOE, en tanto que CiU y ERC se han manifestado en contra.