MEDIO AMBIENTE
Los ciudadanos de todos los rincones “apagan la luz y encienden el planeta”
Por Javier M. Fandiño2 min
Sociedad27-03-2010
Un acto simbólico para mover el mundo. Del Empire State Building a la Ópera de Sidney, de la Puerta de Alcalá a la de Brandeburgo, millones de personas decidieron sumarse a la lucha contra el cambio climático promovida por la organización ecologista WWF/Adena. Más de 4.000 ciudades situadas en 121 países distintos cambiaron la iluminación eléctrica por las velas durante 60 minutos. Como asegura su impulsora “un gesto es un símbolo; millones de ellos una acción global”.
Un año más, la organización WWF ha convocado la iniciativa global ‘La Hora del Planeta’ con el objetivo de mostrar a los que están en el poder que es necesario actuar de forma inmediata contra el cambio climático. Durante poco más de una hora, las luces de millones de hogares, empresas, organizaciones y monumentos emblemáticos de más de 4.000 ciudades repartidas por 121 países retrocederán al siglo XVIII, donde no había bombillas y tampoco la inminente amenaza de que los propios hombres destruyeran el planeta que crearon. La organización impulsora considera más necesario que nunca este gesto simbólico “después de los decepcionantes resultados de la Cumbre del Clima celebrada en Copenhague el año pasado”. Para WWF, los acuerdos internacionales alcanzados tras la reunión celebrada el pasado mes de diciembre en Dinamarca por los líderes mundiales han sido “insuficientes y poco ambiciosos” impidiendo un encuentro en las políticas de países desarrollados y en vías de desarrollo. Bajo el lema “Apaga la luz, enciende el planeta”, los promotores han contado con el respaldo del Secretario General de la ONU, Banki Moon, o con el Premio Nóbel de la Paz de 1984, Desmond Tutu. Asimismo, han colaborado empresas españolas como Inditex, Telefónica o el Grupo PRISA. Aunque WWF reconoce que la acción no es más que un simple acto simbólico, reconoce la importancia que han tenido otros gestos similares en el transcurso de la historia, y llega a comparar su acción con el Boston Tea Pary o Motín del Té, que marcó un precedente en la independencia de EEUU respecto a la corona británica, o las protestas pacíficas de los años 60. Solamente en España en el año 2009 participaron 4 millones de habitantes y 200 ciudades, llegando a apagar monumentos emblemáticos como el museo Guggenheim, la Alhambra de Granada, Cibeles o la Torre Agbar de Barcelona. Aún así, se especula que la participación este año sea mucho mayor, sobre todo a nivel particular.