DETENCIONES ETARRAS

Las continuas detenciones de los miembros de ETA la colocan en una situación extrema

Por Gracia Paula1 min

España24-03-2010

"Nuestra movilización es total. Vamos a erradicar todas sus bases", ha declarado Nicolas Sarkozy tras el funeral del gendarme asesinado por ETA la semana pasada. Esta declaración muestra la contundente línea antiterrorista que junto a España va a mantener el Gobierno francés. El incremento de su dureza se debe a que ETA cada vez más busca refugio en el país vecino para preparar los atentados y coordinar a sus comandos.

El presidente del Gobierno de España, José Luis Rodríguez Zapatero ha mantenido una reunión en El Elíseo con el presidente galo tras el funeral por el policía francés que perdió la vida en un tiroteo contra unos miembros de la banda terrorista y allí ha advertido que los miembros de ETA “van a ser perseguidos sin descanso por dos grandes policías”, refiriéndose a la francesa y a la española. Francia ha sido habitualmente para la banda un lugar para almacenar el material y robar automóviles y explosivos para utilizarlos en España. Entre los años 2005 y 2009 las Fuerzas de Seguridad francesas detuvieron 162 de los 466 arrestados en España y Portugal. En el primer trimestre de 2010 de las 35 detenciones a miembros de la banda terrorista, ocho tuvieron lugar en Francia. ETA en un comunicado dirigido a “la ciudadanía vasca” no menciona el atentado de París en el que falleció un policía francés y advierte que está dispuesta a "dar los pasos que sean necesarios para favorecer el cambio político” y afirma que el Ejecutivo "pretende vender la fantasía de la salida policial", aunque el ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, "sabe muy bien que la única vía que garantiza el final de la resistencia vasca es el reconocimiento de los derechos de Euskal Herria". La nueva estrategia de ETA, ante las reiteradas detenciones, es el uso de jóvenes que hayan participado en actos de Kale Borroka. Se trata de personas jóvenes e inexpertas en el mundo terrorista al más alto nivel. Esto les hace todavía más peligroso por la facilidad que encuentran para escalar puestos en la banda y por la falta de serenidad en determinadas situaciones como ante una orden policial.