Esta web contiene cookies. Al navegar acepta su uso conforme a la legislación vigente Más Información
Sorry, your browser does not support inline SVG

ARCO 2002

La ampliación de las instalaciones no convence a todos los galeristas

Por Eliane Hernández MontejoTiempo de lectura1 min
Cultura16-02-2002

Un total de 261 galerías de 31 países, de las que 103 son españolas, dan a conocer en Madrid las últimas propuestas de vanguardia y las obras de los grandes nombres del arte contemporáneo, más de 4.000 artistas están recogidos en la feria.

Por eso la organización espera que este año aumente el número de asistentes, quienes, además de visitar las exposiciones, podrán asistir a conferencias, encuentros y debates. La comodidad del público y de los galeristas ha sido precisamente lo que ha motivado que se hallan habilitado también para la muestra los pabellones 7 y 9 del Parque Ferial Juan Carlos I. El arquitecto Vicente Salvador ha diseñado los pabellones basándose en la idea de una ciudad, con avenidas, plazas, áreas de descanso y servicios. Así existe una zona de Chills Out dedicada a facilitar el descanso de los visitantes. Y están divididas entre readings (para lectura), crossings (que se sitúan en los laterales de los pabellones) y sittings (localizados, fundamentalmente, en el área dedicada a las revistas y otras publicaciones, que han bautizado como La palabra escrita). Sin embargo este nuevo diseño no es del agrado de todos los galeristas que ocupan el pabellón 9, ya que consideran que existe una gran desigualdad en la distribución del espacio público. En el resto de pabellones, los pasillos centrales son grandes avenidas, en el 9, sin embargo, el ancho de los pasillos va decreciendo considerablemente en los laterales. Algunos galeristas han llegado a afirmar que “a los arquitectos que han diseñado este espacio les tendrían que dar el cum laude a la desigualdad democrática”. Ya que los que ocupan estas zonas se quejan de que pagan lo mismo por metro cuadrado, pero están en peores condiciones. La desigualdad se debe a que los stands han sido concebidos con espacios que oscilan entre los 50 metros cuadrados y los 150 como máximo. Lo que obliga a establecer unas jerarquías, pero, según los responsables, “todo el mundo quiere estar en lo que consideran el mejor lugar, y eso no es posible”.