CASO GESCARTERA

La Caixa queda absuelta en el caso Gescartera; Caja Madrid no

Por Rocío López1 min

Economía18-11-2009

La Caixa no tendrá que pagar el agujero de Gescartera según la absolución del Tribunal Supremo, al estimar su recurso de casación (contra el fallo definitivo que se declaró a principios de 2008). Será Caja Madrid Bolsa la que tendrá que hacer frente a ello de forma parcial como responsable civil subsidiaria. Como el propio fiscal ha establecido durante el juicio la cifra que podría llegar a pagar la entidad madrileña es de 26,37 millones de euros.

Esto tendrá como fin el pago de las inversiones a todos los clientes de Gescartera que pasaron por sus cuentas (puede legar a más de 2000 afectados). "Se declara la responsabilidad civil subsidiaria de Caja Madrid Bolsa, si bien sólo por lo ilegítimamente distraído por los responsables de Gescartera condenados, del total de los recursos gestionados como depositaria, durante el tiempo de prestación de servicios" es lo que reza el fallo final de la jornada judicial de hoy. Y como ese mismo fallo del Supremo confirma, Antonio Camacho, propietario de Gescartera, será condenado a 11 años de cárcel por apropiación indebida y falsedad documental de los 87,99 millones de euros que quedaron al descubierto en la agencia de valores. Aunque éste ya se encuentra cumpliendo condena en el Centro Penitenciario Madrid VI de Aranjuez desde el 27 de marzo de 2008. También han sido condenados el segundo de Camacho, José María Ruiz de la Serna (diez años y medio de prisión); Francisco Javier Sierra de la Flor, apoderado (seis años de cárcel) y Pilar Giménez Reyna (tres años y medio). Aún así han sido absueltos otros relacionados con el caso Gescartera, que en un principio habían sido condenados como Aníbal Sardón absuelto de los nueve años de prisión pero obligado a pagar 88.671 euros o Julio Rodríguez Gil. Se pone así fin al caso Gescartera, el cual provocó en 2001 la intervención de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) en esta Agencia de Valores ante sospechosas de malas prácticas y falta de información (no se conocía el destino de sus fondos). Al fina resultó en un agujero de 87,99 millones de euros y las dimisiones del Secretario de Estado de Hacienda, Enrique Jiménez Reyna y la presidenta de la CNMV Pilar Valiente.