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FÚTBOL

El Barcelona conquista el ¬triplete¬

Por Álvaro HeraltaTiempo de lectura5 min
Deportes29-06-2009

El Barcelona de Josep Guardiola ya ha conseguido inscribir su nombre en mayúscula en la historia del fútbol. Con la conquista de la Liga de Campeones, los culés se han unido al selecto club que conformaban hasta ahora el Ajax de 1972, el PSV de 1988, el Celtic de Glasgow en 1967 y el Manchester de 1999 de equipos que han logrado el triplete en una temporada. El mantener un estilo propio y apostar siempre por un juego ofensivo son las claves sobre las que se ha cimentado su éxito.

La fuente de Canaletas, lugar de peregrinación del aficionado azulgrana cuando el Barça logra un éxito, últimamente no para de tener de celebraciones. Si hace apenas unas semanas los fans del conjunto catalán se echaron a la calle para festejar la consecución de la Liga y la Copa del Rey en apenas tres días, la situación se volvió a repetir con la conquista de la Copa de Europa. Sin embargo, el camino hacia el cetro continental, pese a que parezca lo contrario, no ha sido nada fácil. Éste comenzó en agosto, cuando los hombres de Guardiola se enfrentaron al Wisla de Cracovia, todavía enmarcados en un mar de dudas sobre qué les iba a deparar la temporada. El 4-0 de la ida fue suficiente para rubricar la presencia de los de la Ciudad Condal entre la élite del Viejo Continente, pese a que en la vuelta se cayó por la mínima en Polonia. Ya en la fase de grupos, el Barcelona no tuvo problemas para acabar como líder por delante de escuadras como Sporting de Lisboa, Shakhtar Donetsk –que al final de esta temporada se proclamó campeón de la Copa de la UEFA- y Basilea. En los octavos de final el adversario fue el Olympique de Lyon. En la ida, los galos se adelantaron en el marcador y dispusieron de claras ocasiones para aumentar su renta. Sin embargo, ahí apareció Thierry Henry para rescatar con un testarazo un valioso empate. En la vuelta, los blaugrana recuperaron su juego preciosista de toque para aniquilar a los franceses con un contundente 5-2, aunque lo mejor aún estaba por llegar. En los cuartos de final los hombres de Guardiola mandaron un claro mensaje al resto: querían la corona continental sí o sí. La eliminatoria contra el Bayern de Munich únicamente duró cuarenta minutos, los que necesitaron los Leo Messi y compañía para endosar un 4-0 a los teutones en una primera parte de ensueño. Así la vuelta en Munich resultó un mero trámite (1-1). Aunque, en semifinales llegaron los mayores problemas para los del Camp Nou en toda la competición. El Chelsea, dirigido por un soberbio estratega como es Guss Hiddink, planteó el partido de ida en la Ciudad Condal con un único objetivo: no encajar ningún gol. Las premisas del técnico holandés, gracias a las paradas de Peter Cech y una dura defensa, se cumplieron y el Barça viajó a Stamford Bridge con la obligación de ganar o, cuanto menos, empatar en un encuentro con goles. Sin embargo, las cosas no pudieron comenzar peor y una extraordinaria volea de Mickael Essien adelantó a los londinenses. A partir de entonces, Hiddink ideó una tela de araña que ahogó el juego de los visitantes. De hecho, en 90 minutos lo culés no habían realizado disparo alguno entre los tres palos sobre la meta adversaria. Ahí emergió la figura de Andrés Iniesta para convertirse en una leyenda de la historia de los catalanes. En la pierna del manchego se encarnó el espíritu de José Mari Bakero en 1991 en Kaiserlautern para sellar con un derechazo la presencia de los españoles en la final ante el delirio de los miles de aficionados que acompañaron al equipo y la decepción de los locales. En la final esperaba otro plato fuerte: el Manchester United, campeón de 2008. Pese a los titubeos iniciales, los goles de Samuel Eto’o y Messi se encargaron de hacer realidad un sueño que había comenzado en la fase previa de agosto: ganar la tercera Copa de Europa. Nombres propios del triunfo Sin duda alguna, el principal artífice del éxito culé tiene nombre y apellidos: Josep Guardiola. El técnico de Santpedor, en su primera temporada en la élite, ha logrado la machada de conquistar todos los títulos en juego después de haber cogido un equipo en ruinas. Los triunfos han llegado después de que Guardiola impusiera un estilo propio a su equipo, que no han cambiado fuera el que fuera el rival que tuvieran enfrente. Otro de los nombres propios es Henry. El galo ha conseguido resarcirse de una irregular primera campaña en España y logró el único gran título que faltaba para redondear su fastuoso palmarés: la Liga de Campeones, motivo por el que abandonó el Arsenal. También tiene relevancia el caso de Eto’o. El camerunés en julio tenía abierta la puerta de salida y en mayo es uno de los referentes del equipo y se ha convertido en el primer jugador de la historia del Barça que marca en dos finales europeas. Así como también hay que destacar la aportación de Gerard Piqué e Iniesta. El catalán se proclamado campeón de Europa por segundo año consecutivo y ha sido una de las revelaciones de la temporada, mientras que el manchego ha pasado de ser el suplente de Mark Van Bommel en la final de 2006 a ser el gran referente sobre el que se ha movido el Barça del triplete