CATÁSTROFE NATURAL

Semana Santa catastrófica en Italia

Por Paula López2 min

Sociedad10-04-2009

El 10 de abril, Viernes Santo, se celebró el funeral de 205 de las 289 víctimas recontadas hasta entonces que murieron en el terremoto de Italia. Más de 8.000 personas acudieron a la plaza de LŽAquila donde se celebraba la ceremonia.

Desde el lunes santo de madrugada los temblores de tierra no cesaron en la región del Abruzzo, a 100 kilómetros al noreste de Roma. El primero, y más grave, llegó a los 6,3 grados de la escala Ritcher, pero fue sucedido por otros, en horas y días posteriores, que llegaron a alcanzar más de cinco grados en esa misma escala. Esta Semana Santa se registraron en el centro de la península itálica un total de 806 temblores, según el primer ministro italiano Silvio Berlusconi. El tipo de construcción de los edificios, muchos hechos de cemento y arena de mar (material ilegal) y la dificultad de prever este tipo de catástrofes han hecho que se hayan contabilizado, hasta el Viernes Santo, 1.170 heridos, 179 en estado grave, 289 víctimas mortales, 28.000 personas que han perdido su hogar, 10.000 edificios destruidos y alrededor de una veintena de desaparecidos. Otras catástrofes naturales El número de catástrofes naturales va cada vez a más, en las últimas dos décadas el número de desgracias relacionadas con fenómenos de la Tierra se han multiplicado por cuatro. La mano del hombre y el calentamiento global son, según los expertos, las principales razones de que estas desgracias aparezcan. Según Intermón Oxfam, el cambio climático eleva un 400 por ciento al año los desastres naturales. El huracán Katrina devastó la ciudad de Nueva Orleans en 2005, un año antes un tsunami mató a más de 150.000 personas en Indonesia, los huracanes en Centroamérica provocan la muerte y arrasa el hogar de miles de personas cada año y las sequías dejan sin provisiones a otras miles de personas. Los desastres naturales no entienden de categorías sociales, afectan tanto a países desarrollados como al tercer mundo, pero las consecuencias de uno y de otro son muy diferentes: si en los países ricos estos desastres afectan más al patrimonio, en los pobres dejan más víctimas mortales, de hecho, el 98 por ciento de las víctimas de los desastres naturales son de países con bajos índices de desarrollo. En España, las inundaciones y las sequías son las catástrofes naturales que más repercusión tienen en la economía del país. Además, en diez años (de 1995 a 2005), los expertos afirman que se han producido más de 700 fallecimientos por riesgos naturales, una tercera parte causados por las inundaciones.