CLIMATOLOGÍA
El temporal mantiene en alerta a 28 provincias españolas
Por Tamara Santos2 min
Sociedad09-01-2009
Los niños españoles ya se han despedido de la Navidad, pero muchos han prolongado sus vacaciones. El temporal ha sido el causante de que miles de colegios de Madrid, Cataluña, Cantabria y Castilla y León hayan interrumpido sus clases. Los adultos, por el contrario, han visto afectadas sus rutinas y han vivido el cambio meteorológico como un caos.
La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha declarado alerta a 28 provincias y a 23 en riesgo para los próximos días, como consecuencia de la ola de frío siberiana que está azotando la Península. El Ministerio de Fomento ha repartido más de 700 máquinas quitanieve a las zonas más afectadas pero, aun así, los ciudadanos manifiestan sus quejas por la falta de intervención. Pilar Gallego, directora de Protección Civil, declaró haber informado semanas antes de la situación, y recalcó la buena coordinación que mantienen las Administraciones. A pesar de ello, la nieve sorprendió a todos los madrileños el pasado día 9. Desde las ocho de la mañana, la capital comenzó a transformarse en lo que, más tarde, sería una ciudad cubierta por una gran capa de nieve. Los principales problemas fueron de circulación, tal y como suele suceder en estas situaciones. Con un total de hasta 390 kilómetros de atascos en carreteras a lo largo de la mañana, muchos conductores se desesperaban mirando el reloj. El metro y el tren eran los medios de transporte más seguros, aunque hubo más retrasos que de costumbre. En el aeropuerto de Barajas eran frecuentes las esperas y varios vuelos fueron cancelados. Las pistas estaban heladas y eran necesarias más máquinas para despejar el hielo. El servicio de emergencias se incrementó para atender pequeños accidentes de vehículos y resbalones. Además los parquímetros se suspendieron para mejorar la circulación. Si en las ciudades la gente se vuelve loca con tanto cambio meteorológico, en las sierras y montañas ya están más que acostumbrados. El frío y la nieve no son nada nuevo y por eso se preparan a lo largo del año para tener alimentos y leña en sus casas. Las familias hacen vida normal tanto en el trabajo como en la escuela. El temporal ha mostrado su lado más violento en otros países del norte de Europa con, al menos, 14 muertes. En Suecia, siete personas han fallecido como consecuencia del fuerte viento que alcanzó los 100 kilómetros por hora. Tres de las víctimas murieron tras el impacto de unos árboles derribados. En Dinamarca, la situación se repitió dejando, esta vez, cuatro víctimas mortales y a tres desaparecidas. Inglaterra ha vivido una situación dramática de inundaciones en la parte noreste; en la ciudad de Carlis, el temporal ha acabado con la vida de tres personas.