BÉLGICA
La crisis política belga tiene un nuevo salvador, Wilfried Martens
Por Luis González-Aller1 min
Internacional28-12-2008
El ex primer ministro belga Wilfried Martens ha asumido la tarea de intentar sacar a Bélgica de la crisis política en la que se encuentra. Esto se debe a que ninguno de los cinco partidos que forman coalición al frente del Gobierno se pone de acuerdo para nombrar un primer ministro.
El monarca belga, Alberto II, pidió, tras tres días de conversaciones con diferentes políticos, al ex primer ministro Wilfried Martens que le ayudase a afrontar la crisis institucional que asola el país. El rey aceptó antes de todo esto la renuncia del antiguo primer ministro Yves Leterme, pero pidió a cambio que su Gobierno continuase de forma interina. Esta tercera crisis política que surge en Bélgica se debe al informe del Tribunal Supremo que salió a la luz y en el que había indicios de intromisión por parte del antiguo gobierno sobre el plan financiero de rescate del grupo Fortis. Los desacuerdos entre demócratas y liberales han hecho imposible el entendimiento entre ambos. Aunque se proponía un líder democristiano con mucha experiencia como Jean-Luc Dehaene, quien había ocupado el sitio de primer ministro en dos ocasiones, los liberales se oponían rotundamente. Estas crisis, según los expertos, se deben a los continuos choques que existen entre los partidos de habla neerlandesa, que piden más poder para los flamencos, y los partidos de habla francesa, quienes tienen miedo de que se produzca una gran escisión en el país. A pesar de las complicaciones, el ex primer ministro Wilfried Martens ha asegurado que "es una tarea difícil, pero no imposible".