CICLISMO

Contador ¬se lanza¬ a por la Vuelta

Por Álvaro Díaz6 min

Deportes14-09-2008

Alberto Contador es el nuevo líder de la Vuelta a España. Un puesto que el corredor del Astana arrebató a Egoi Martínez y que no parece dispuesto a abandonar. Además, el despiste de Alejandro Valverde en la cuarta etapa de la semana allanó el camino del ganador del Giro de Italia hacia una victoria definitiva en esta Vuelta.

La tercera semana de la Vuelta a España tuvo como primera prueba un recorrido de 200 kilómetros, que separaba las localidades de Vielha y Sabiñánigo. Desde el inicio de la etapa se sucedieron numerosos ataques que el equipo Astana supo controlar a la perfección. Sin embargo, en el descenso del segundo puerto del día, el Coll de L¬Espina, se formaba el grupo principal de la jornada, que conseguiría llegar a la meta sin ser cazado por el pelotón. Además de Damiano Cunego, Greg van Avermaet o Alan Pérez, en la escapada buena se encontraba el navarro Egoi Martínez. La diferencia de los escapados iba en aumento y su esfuerzo tuvo finalmente fruto: el triunfo se los disputaron entre ellos, sin preocuparse por el grueso. La etapa acababa decidiéndose en un sprint, en el que el belga Van Avermaet supo moverse mejor que nadie y cruzar primero la meta. La atención se centró entonces en Egoi, que gracias al tapón de su equipo, el Euskaltel Euskadi, consiguió una ventaja que le valió vestirse de oro. Con ello, en la clasificación general, se situaba Leipheimer en segundo lugar, seguido de Alberto Contador. Tras la última etapa de montaña de Los Pirineos, a los ciclistas les esperaba Zaragoza, situada a 151 kilómetros. Los bandazos del recorrido se iniciaron en el Puerto de Monreós, de segunda categoría, donde Matej Jurco saltó del pelotón en el descenso seguro de su éxito. Sin embargo, el pelotón terminó por alcanzar al ciclista del Milram, que echó en falta la ayuda de sus compañeros de equipo. Entonces los equipos de los sprinters se dispusieron a controlar la carrera. El Rabobank de Freire, el Gerolsteiner y el Euskaltel de Egoi quisieron evitar una sorpresa, que finalmente acabó produciéndose. Inesperadamente, Sébastien Hinault, con quien el pelotón no contaba, disputó el sprint final y se llevó la etapa. Por detrás del francés cruzaron Lloyd Mondory y Vam Avermaet. Óscar Freire acabó en cuarta posición. Así, no hubo finalmente importantes cambios en la general. Los esprínters, tras la irrupción de Hinault en Zaragoza, volvían al día siguiente a tener una nueva oportunidad sobre los 178 kilómetros que separan Calahorra y Burgos. El día comenzó con la escapada del trío de ciclistas formado por Serafín Marínez, José Antonio López Gil y Andryi Grivko. Tras la ascensión del Alto de Valmada el pelotón, sobre todo los equipos Lampre, Liquigas y Quick Step, comenzó a apretar y poco a poco fue alcanzando a unos fugados que tenían los minutos contados. Cuando sólo faltaban seis kilómetros para el final de la etapa, el trío de corredores quedó neutralizado y el esprín se ofreció como la mejor opción para cruzar primero la meta. Óscar Freire voló sobre el asfalto de Burgos y alcanzó su primer triunfo en la presente Vuelta, seguido de Tom Boonen y Juan José Haedo, segundo y tercero respectivamente. Por otro lado, Egoi Martínez no sufrió en ningún momento para mantener el liderato, en una etapa en la que su equipo veló siempre por sus intereses. En la siguiente etapa, 186 kilómetros desde Burgos hasta Suances, Alejandro Valverde tuvo que desperdirse de hacer algo grande en la presente edición de la Vuelta a España. La jornada comenzó, al igual que el día anterior, con la fuga de tres hombres: Sandy Casar, Sebastien Hinault y Manuel Quinziato. El pelotón esperó al descenso del Alto del Caracol para neutralizar la escapada y entonces se produjo la sorpresa del día. Valverde retrocedía unos metros debido a unas molestias en la rodilla y justo en ese momento comenzó a llover, con lo que el grueso se dividió en dos, quedando el murciano rezagado del grupo principal. La cabeza de la carrera no desaprovechó la oportunidad y apretó al máximo para acabar logrando una ventaja de más de tres minutos con respecto a Valverde. Finalmente, Paolo Bettini, tras un majestuoso sprint, quedó por delante de Davide Rebellin y Cunego. El italiano consiguió así su segundo triunfo en esta Vuelta. Egoi Martínez, pudo, por su parte, mantener un día más el maillot de líder,a unque no le duraría mucho. Aparece Contador y deslumbra Los corredores gozaron el viernes de un merecido descanso, que les sirvió para tomar fuerzas antes de la temible ascensión del sábado en el Angliru. Ya en el día de competición, el gran protagonista fue Alberto Contador, que completó una brillante ascensión al temido puerto y, además de cruzar primero la línea de meta, se convertía en el nuevo líder de la general, tras una gran demostración de fuerza y resistencia. El día comenzó tranquilo. Los equipos Astana y Euskaltel Euskadi controlaban sin problemas la fuga de Christophe Kern, Maarten Tjallingii y Matej Jurco. La parte negativa de la etapa llegaba en el descenso del Alto del Cordal, donde Igor Antón sufría una importante caída que le obligaba a abandonar. La carrera prosiguió su curso y los ciclistas afrontaban el Angliru. El equipo Astana tiró del grueso y el trío de aventureros saludaba de nuevo al resto de compañeros. Fue entonces cuando la prueba alcanzó toda la emoción que el ciclismo puede ofrecer. José Luis Rubiera y Sergio Paulinho estiraron el grupo hasta fragmentarlo por completo. Más tarde, el empuje de Alejandro Valverde dejaría tocados a la mayoría de corredores, exceptuando a Contador, Levi Leipheimer y su compañero Joaquín Rodríguez. Sería entonces el de Pinto, el que daría el latigazo definitivo para marcharse en solitario, dejando atrás a todos. Detrás de él, llegó Valverde, que demostró su gran podería y buen hacer sobre una bicicleta. A continuación, llegaron Joaquín y Carlos Sastre. La última etapa de la semana sirvió para que Contador afianzara aún más su liderato, al conseguir su segunda victoria consecutiva. El líder del Astana, además, consiguió arañar segundos a Sastre y a Valverde, y ya parece que nadie podrá pararle. Fue esta una jornada que contó con el abandono de López Gil y Davide Rebellin, y que tuvo como principal fuga la formada por once hombres, entre los que destacaban Sylvain Chavanel y Damiano Cunego. A partir del penúltimo puerto del día, el Alto de Colladiella, la distancia entre el grueso y los fugados se fue acortando poco a poco. Finalmente, el Caisse d’Espargne trabajó duro y acabó dando caza a los aventureros. Entonces, ya en la ascensión al último puerto, el de San Isidro, se sucedieron numerosos ataques. Garate y Sastre no obtuvieron frutos de su esfuerzo, mientras que Ezequiel Mosquera sí consiguió imprimir a la carrera un ritmo frenético, que sólo Contador y Leipheimer pudieron seguir, mientras que Sastre y Valverde iban cediendo terreno. Por último, el actual líder de la general decidió marcharse en solitario y cruzar primero la meta. Tras él, Leipheimer y Mosquera llegaron segundo y tercero, respectivamente. Contador, si no ocurre nada excepcional, es el candidato más firme a la victoria final en Madrid.