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EE.UU.

La tenencia de armas, un derecho constitucional en EE.UU.

Por LaSemana.esTiempo de lectura1 min
Internacional29-06-2008

El Tribunal Supremo de Estados Unidos ratificó la pasada semana el derecho de todo estadounidense a poseer armas de fuego. En una declaración sin precedentes, destinada a anular una ley local que prohibía la venta y tenencia de armas de bajo calibre, el Supremo falló a favor de la Asociación Nacional del Rifle (NRA) y diversas organizaciones de amantes de las armas.

El Supremo, por cinco votos a favor y cuatro en contra, declaró la pasada semana que sería anticonstitucional prohibir el acceso a las armas de fuego a sus ciudadanos. En alusión a una ley local de la ciudad de Washington, que desde 1976 prohíbe la compraventa de armas y su posesión, el Supremo evitó que otras instituciones locales se contagiaran de tal iniciativa y anuló la ley seca de armamento que sufría la ciudad. Según la NRA este pronunciamiento del Supremo puede favorecer un efecto dominó que acabe con las legislaciones restrictivas que rigen en algunos estados del país. El centro del debate en el seno del Supremo fue el de interpretar el artículo de la enmienda constitucional de 1791 que hace alusión al derecho a poseer armas. “Teniendo la necesidad de una milicia bien preparada para la defensa de un Estado libre no se privará a los ciudadanos del derecho a poseer armas”, dice la enmienda. Los candidatos presidenciales no tardaron en hacerse eco de la decisión del Supremo en un tema tan sensible a la opinión pública. Mientras el candidato republicano, John McCain, calificaba de “victoria histórica” el pronunciamiento, el demócrata Barack Obama se mostró más moderado. “Siempre he creído en el derecho de los ciudadanos a tener armas, pero también entiendo las necesidades de las comunidades más azotadas por la violencia”, declaró el senador por Illinois. En Estados Unidos aproximadamente el 40 por ciento de los hogares posee al menos un arma de fuego y unos 30.000 ciudadanos al año mueren como consecuencia de heridas causadas por éstas. Pese a todo, alrededor de un 70 por ciento de la población continúa convencida de que la tenencia de armas debe ser un derecho.