TRAS EL 9-M
Rajoy no dimite y anuncia que lo intentará de nuevo con un equipo propio
Por Irene E. Sánchez3 min
España16-03-2008
“Primero, porque mi candidatura ha mejorado sus resultados; segundo, porque es lo mejor para el PP y para España, y en tercer lugar, porque me respaldan más de diez millones de españoles y tengo un buen proyecto político”. Tras estas palabras se parapetó el líder del PP, Mariano Rajoy, al anunciar que no dimitirá pese a la segunda derrota electoral seguida contra el socialistas José Luis Rodríguez Zapatero.
De este modo despejó las dudas y los rumores acerca de su futuro dentro del Partido Popular, incierto tras la noche del 9-M y su discurso en el balcón de la sede del partido en la calle Génova que concluyó con un contundente “adiós”. Rajoy anunció que se presentará con su propio equipo el próximo mes de junio al XVI Congreso nacional del Partido Popular, en el cual se elegirá por votación mediante sistema de voto mayoritario a una sola vuelta a quien ostentará las funciones de dirección de la formación. La primera reunión de hora y cuarto con los dirigentes de su partido tuvo lugar a puerta cerrada, y en ella les comunicó su decisión de proseguir al mando de la formación. Sus palabras fueron acogidas con júbilo por los presentes, que escucharon el análisis de los últimos cuatro años de labor del PP, “difíciles” para el líder de la oposición. El presidente del PP, aseguró públicamente el martes 11 de marzo, día en que se conmemoraba el cuarto aniversario del mayor atentado terrorista de España, y tras haber concertado una reunión previa con los miembros de su partido, que “a ese congreso se puede presentar cualquier militante del PP con el equipo que estime oportuno y proponiendo lo que quiera proponer”. Pero dejó bien claro previamente que él será uno de los candidatos y que el equipo con el que contará “lo anunciará exactamente el día anterior a que se celebre la votación en el congreso”. Rajoy pedirá en abril a la Junta directiva nacional, que el congreso se convoque en junio. A tres meses de lo que pudiera anunciar Rajoy en la celebración popular el simple hecho de que aguardará hasta ese momento para decir con claridad a qué personas dará su confianza demuestra que los cambios dentro de este equipo no quedan descartados. Uno de ellos se ha puesto ya sobre la mesa. El portavoz del PP en el Congreso hasta el momento, Eduardo Zaplana, anunció el 13 de marzo su decisión de no renovar como portavoz parlamentario del Grupo Popular. Todo ello, asegura, “para fomentar la renovación y dar entrada a una nueva persona”. No dudó en destacar, además, algo que enlaza con todo lo anterior, y que resume quizás las aspiraciones de Mariano Rajoy para estos próximos cuatro años que perfilará en el Congreso de junio: “se abre una etapa nueva donde hay que aplicar una estrategia nueva. Las renovaciones siempre son positivas”. En definitiva, porque se siente arropado por más de diez millones de personas, porque apuesta por su proyecto político –ya ha asegurado que llevará a cabo el programa electoral que ya propuso para el PP-, porque “en estos momentos es lo mejor para España” y para su partido, y porque el Partido Popular ha mejorado sus resultados por encima del 40 por ciento, Mariano Rajoy se muestra convencido de no querer presentar su dimisión y de, no obstante, proseguir su lucha en la que se convierte en su segunda legislatura en la oposición. Esto, en el caso de que nadie más se presente como candidato y con equipo propio al próximo Congreso nacional del PP. Por ahora, ninguno de los posibles sucesores ha señalado tales aspiraciones, más bien todo lo contrario: apoyar a Rajoy en el que, desde el pasado día 11, es su tercer intento de ser presidente del Gobierno.