11-M
El cuarto aniversario de la matanza se salda con un homenaje de perfil bajo
Por Ángel Prada
3 min
España11-03-2008
Los Reyes, el Presidente del Gobierno, el líder del PP, el Alcalde de Madrid, la Presidenta de la Comunidad, la vicepresidenta del Gobierno; ningún político quiso rechazar la oportunidad de ir al solemne y discreto homenaje realizado a las víctimas del 11-M. En cambio, si se notó la ausencia de los familiares de las víctimas, puesto que hubo varias sillas vacías en el espacio reservado para éstos.
Durante todo el 11 de marzo se hicieron varios actos para recordar a las víctimas de los atentados perpetrados hace ya cuatro años. En Madrid se rindieron varios homenajes, aunque el más importante fue el de las 12 del medio día, en la estación de Atocha, junto al monumento cilíndrico levantado como recuerdo de los 192 muertos, en el que asistieron sus Majestades los Reyes, el Presidente del Gobierno, José Luís Rodríguez Zapatero, la Vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, el líder del PP, Mariano Rajoy, el Alcalde de la capital, Alberto Ruíz-Gallardón y la Presidenta de la Comunidad, Esperanza Aguirre, además de varios ministros en funciones. Sin embargo, los que no asistieron fueron varios familiares de las víctimas de los atentados. Así se puso de manifiesto al quedarse vacías varias de las sillas destinadas para los familiares de las víctimas en este homenaje de Atocha que fue sencillo y solemne. Los políticos superaron en número a los familiares, estos últimos apenas asistieron un centenar de ellos. Efectivamente, en el acto coincidieron Zapatero y Rajoy, quienes solamente se saludaron desde la distancia con un movimiento de cabeza. Este fue el primer acto en el que el recién elegido presidente se encontraba con el líder popular tras las elecciones. Fue una breve ceremonia de unos diez minutos de duración en el que no hubo discursos. Los reyes colocaron una corona de laurel frente al mausoleo dedicado a las víctimas y se guardó un minuto de silencio. El acto finalizó con un coro que cantó el Da pace dominen, una obra del compositor estonio Arvo Part, inspirada en los atentados. La mujer del Presidente del Gobierno, Sonsoles Espinosa fue una de las integrantes del coro en el que se la pudo ver en primera fila. OTROS ACTOS Pero hubo varios actos más en Madrid. Uno de ellos fue a primera hora de la mañana, en el que presidieron un breve homenaje de 10 minutos Aguirre y Ruíz-Gallardón, quienes depositaron una corona de laurel adornada con la bandera de España y la de Madrid. En este acto acudieron también los portavoces de todos los grupos del Parlamento regional, los miembros del Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid, diputados regionales y representantes sindicales. Además, Juan Antonio García Casquero, quien sustituirá a Francisco Alcaraz al frente de la Asociación de Víctimas del Terrorismo, y Ángeles Dominguez, presidenta de la Asociación de Ayuda a las Víctimas del 11-M. Y muchos ciudadanos. En el sencillo homenaje, sonó el Réquiem de Mozart. Una hora más tarde, los sindicatos CCOO y UGT, por su parte, realizaron una ofrenda floral en la entrada de la estación de Atocha-Cercanías. El acto comenzó con dos minutos de silencio que concluyeron con los aplausos de las más de cien personas que se congregaron a esa hora en la puerta de acceso. "Hoy es un día difícil, de dolor y lágrimas", dijo la presidenta de la Asociación 11-M Afectados de Terrorismo, Pilar Manjón, que perdió a su hijo en los atentados. En el escenario habilitado para la ofrenda, con un cartel de fondo que decía 192 víctimas en nuestro recuerdo, Manjón expresó con voz quebrada que "tras una noche en blanco llega una mañana difícil", máxime cuando "se nos han vuelto a remover las entrañas" con el asesinato de Isaías Carrasco a manos de ETA. Pero, además, no sólo en Madrid se rindieron homenajes. En el corredor del Henares también les recuerdan, puesto que por ahí tienen parada los trenes y hubo víctimas de estas localidades como Alcalá, Coslada, San Fernando o Torrejón. En ellos se depositaron ramos, se leyeron comunicados, como el de Pilar Manjón, también estuvieron presentes asociaciones de víctimas. Todos ellos tuvieron en común el recogimiento y el apoyo a los familiares.