ROBO
Interpol se moviliza para rastrear los robos de arte en Suiza
Por Adriana Escalada
2 min
Cultura12-02-2008
Tres hombres armados y enmascarados entraron la semana pasada en el museo de la Fundación Bührle de Zúrich y se lleraron cuatro pinturas de la colección del industrial Emil Georg Bührle, fallecido en 1956. Se trata de las obras Campo de Amapolas en Vétheuil, de Claude Monet; Ramas de castaño en flor, de Vincent Van Gogh; Niño con chaleco rojo, de Paul Cézanne y Retrato del Conde de Lepic y sus hijas, de Edgar Degas. Muchos catalogan este robo de arte, valorado en 112 millones de euros, como uno de los mayores de la historia.
Los ladrones realizaron el hurto cuando el museo estaba abierto para el público. Uno de los delincuentes controlaba a la muchedumbre mientras los otros dos se apropiaban de los cuadros. En tres minutos los bandidos lograron descolgar las obras y llevárselas. Testigos han contado que huyeron en un vehículo blanco en cuya investigación se concentra la policía. Ya se ha ofrecido una recompensa de unos 60.000 euros para quien pueda aportar datos. Para los delincuentes fue fácil encontrar los cuadros porque el museo ofrece una vista virtual de sus instalaciones a través de internet, en la que se pueden apreciar las obras de forma individual. Fuentes policíacas suizas han declarado que "el museo tenía las medidas de seguridad necesarias", pero no contaron con la posibilidad de que "un hurto ocurra a plena luz del día mientras la gente visita la exposición". Al parecer, uno de los autores del hurto tenía acento eslavo y, además la criminalidad en el sector del arte se suele encontrar en Montenegro, Croacia, Serbia y Bosnia-Herzegovina. Julian Radcliffe, presidente de la mayor base de datos del mundo sobre obras de arte robadas, el Art Loss Registe(Registro de Pérdidas Artísticas), se ha arriesgado a decir que las obras "pudieron ser robadas por una banda de la antigua Yugoslavia". Según el experto, "las obras podrían tardar en aparecer unos 20 años". También aseguró que "los ladrones ya no se encuentran en Suiza y será complicado vender las obras de arte robadas en Zúrich al tener un valor tan alto, porque ello requerirá enormes esfuerzos de los mediadores". La Asociación de Museos en Suiza ha alentado a todas aquellas instalaciones en las que se muestran obras de arte que se mantengan en alerta. La Central Europea para la Investigación de Delitos con Obras de Arte, con sede en París, también ha sido informada por las autoridades suizas con el fin de sumarse a las investigaciones.