ASFIXIADOS
Comer y pagar la casa: la pesadilla de los españoles
Por Javier de la Fuente
1 min
Economía01-12-2007
Empujar el carrito de la compra cada vez cuesta más. También hacer frente a la hipoteca. Todos los indicadores se han vuelto en contra de las economías domésticas. Sube todo y lo que baja no lo hace lo suficiente.
Como el Euribor, el que tienen en cuenta la mayoría de los españoles para calcular el importe de su hipoteca. Bajará en noviembre por segundo mes consecutivo, pero paradójicamente encarecerá las hipotecas. Se debe a que en noviembre del año pasado éste se situaba cerca de un punto por debajo. Ahora, según las previsiones, se colocará en el 4,60 por ciento. Para que bajaran las hipotecas tendría que situarse por debajo del 3,80 por ciento -nivel que registró en noviembre de 2006-. El Índice de Precios al Consumo (IPC) adelantado también subirá en noviembre. Los precios se dispararán hasta un 4,1 por ciento, el peor dato en los últimos siete años. El dato ha sido un jarro de agua fría no sólo para los consumidores, el Gobierno ha mostrado su pesimismo ante tal escalada de los precios. Reconoce el significado especial del mal comportamiento del IPC, sobre todo este mes, puesto que es el índice utilizado para calcular la revalorización de las pensiones. Tampoco el futuro es esperanzador para el Ejecutivo. Concretamente, para el ministro de Economía, Pedro Solbes. Confiesa que esta tendencia seguirá o incluso empeorará durante los próximos meses. Para Solbes, “la inflación va a seguir en niveles relativamente altos durante los próximos meses” con cifras, asegura, “en torno al cuatro por ciento”.