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ANIVERSARIO

El centenario de los Nobel maravilla al mundo

Por Pedro Fernaud QuintanaTiempo de lectura2 min
Cultura10-12-2001

Lejano aparece ya aquel año de 1.896 cuando se leyó el testamento de Alfred Nobel, aquel científico sueco que legó la mayoría de su capital económico para recompensar y distinguir las personalidades más relevantes en el mundo de las ciencias -Física, Química, Medicina- la Paz y la Literatura. En 1.926 se incluiría el de Economía.

El carácter cosmopolita de su fundador ha determinado los premios desde su nacimiento. Nobel nació en Estocolmo en 1833 y creció en San Petersburgo. Hablaba fluidamente cinco idiomas -sueco, ruso, francés, inglés y alemán- y vivió durante distintos periodos de su vida en Estados Unidos, Francia, Suecia, Escocia y Alemania, hasta que murió en 1896 en San Remo, Italia. Fue científico e inventor, además de activo industrial que puso en marcha empresas en 90 lugares de veinte países. Fue el creador de la dinamita, que ha prestado notables servicios a la humanidad y que ha sido utilizada también de la manera más devastadora y terrible. Este año han sido 14 los premiados, y en seis categorías. Kofi Annan, que ha conseguido el de la Paz, lo recogió en Oslo; los demás, lo recibieron en Estocolmo. En la lista están George A. Akerlof, A. Michael Spence y Joseph E. Stiglitz, en Economía; William S. Knowles, Ryoji Noyori y K. Barry Sharpless, en Química; Eric A. Cornell, Wolfgang Ketterle y Carl E. Wieman, en Física, y Leland H. Hartwell, R. Timothy Hunt y Paul M. Nurse, en Medicina. Todos acompañan a Vidiadhar Surajprasad Naipaul (Trinidad, 1932).Todos los premios fueron otorgados en Konserthuset de Estocolmo -Suecia-. Excepto el de la paz que había sido dado a Koffi Annan y la ONU horas entes en Oslo -Noruega-. Ambas ceremonias fueron esplendorosas, cuajadas de arias de Haydin, Mozart y Haendel. Fastuosa y colorida, aquella fue una ceremonia muy saludable para recuperar la fe en la bondad del hombre, ahora que el mundo parece estar tan inmerso en una involución a los conflictos y la muerte gratuita. El más controvertido de este año, ha sido el premio otorgado a V.S. Naipaul. El escritor, en su discurso ante la Academia Sueca, se refirió a los dos mundos que alimentan su literatura: crítica a la realidad no occidental y espíritu explorador de las posibilidades que ofrece la literatura. También son dos los perfiles que ofrece en este momento el literato. Luce, de un lado, el hombre arrogante y altivo, que expresa rotundamente sus opiniones; cuya educación pulveriza las buenas formas y que tritura los fundamentos de las culturas musulmana y oriental para situarlas en franca desventaja respecto a la occidental. De otro lado, fascina el caballero que escribe y se ha entregado a la literatura de una manera incondicional y apreciablemente entusiasta. Tal es su obsesión por las letras y la capital importancia que estas desempeñan en su vida que en varias ocasiones ha calificado su vida como "una sucesión de obras literarias".