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SUBDESARROLLO

Casi la mitad de la población pobre del planeta vive en la miseria extrema

Por Leticia PradoTiempo de lectura1 min
Sociedad04-11-2006

El dinero que se invierte al año en comida para mascotas es casi la cantidad requerida para conseguir reducir a la mitad la pobreza extrema en el mundo. Este fenómeno, aunque no es nuevo, afecta a una parte importante de la población mundial, sobre todo a la más vulnerable como son los ancianos, los niños, los inmigrantes, y genera su marginación y exclusión social.

África todavía es la única región del planeta donde la cantidad de pobres continúa aumentando. Pero en todo el mundo muchas personas intentan sobrevivir con menos de 80 céntimos de euro al día. Unas 30.000 mueren diariamente como consecuencia de la situación de miseria en la que viven. Y la mitad de los trabajadores del mundo no son capaces de sostener a sus familias por encima del límite de pobreza de 1,60 euros por persona. En Europa la situación de miseria no ha mejorado mucho en los últimos años. Son consideradas pobres todas aquellas familias que están por debajo del 50 por ciento de la Renta Media Disponible Neta (RDN) en un Estado, establecida en unos 520 euros al mes. En los países de la región del Este, la más pobre del continente, se ha experimentado un progreso económico que ha mejorado las condiciones de vida de los adultos. Sin embargo, muchos niños se encuentran aún viviendo en situaciones de subdesarrollo extremas, en hogares sin agua potable y con una nutrición inadecuada. España se encuentra entre los cinco países con las mayores tasas de pobreza europeas, con un porcentaje superior a la media del continente, pero inferior a la existente en Grecia y Portugal. En este país la pobreza afecta sobre todo a las familias numerosas, los inmigrantes, los jóvenes (un 44 por ciento de los pobres son menores de 25 años) o a los gitanos. La pobreza relativa, aquella en la que se percibe entre el 35 y el 50 por ciento de la RDN, es la más común entre la población española. Le sigue, en menor proporción, la pobreza severa, con menos de un 25 por ciento de la RDN. Las minorías étnicas, estén o no censadas, son las que más sufren estas situaciones de miseria, soportando, en su mayor parte, pobreza severa o extrema.