FÚTBOL
Fabio Capello regresa al banquillo del Real Madrid
Por Ángel Briz2 min
Deportes09-07-2006
El nuevo mandatario del club merengue, Ramón Calderón, presentó en el palco del Santiago Bernabéu al que va a ser su entrenador durante las tres próximas campañas. El técnico italiano, Fabio Capello, era una de las promesas en la campaña electoral de Calderón, que junto a su director técnico Pedja Mijatovic formarán la pareja que ideará un equipo para intentar recuperar la ilusión del madridismo. El currículum del italiano augura eficacia, trabajo y títulos.
"Tengo mucha ilusión por ponerme a trabajar con la plantilla que estamos perfilando. El Real Madrid es el club más importante del mundo y tenemos que volver a ganar títulos. Hay que ser humilde, recuperar el espíritu de la camiseta del Real Madrid". Con estas palabras, Capello daba a conocer sus intenciones en esta nueva etapa en el club blanco, en una breve rueda de prensa tras firmar su nuevo contrato. El presidente del equipo blanco reiteró que tanto Mijatovic como Capello tendrán la libertad suficiente para llevar a cabo la responsabilidad para la que se les ha contratado, algo que siempre ha querido el técnico que hizo campeón de Europa al poderoso Milán de principios de los 90. Fabio quiere reencontrarse con el Raúl González que conoció hace diez años, en su anterior etapa como máximo responsable del área técnica del equipo madrileño, así como al mejor Ronaldo, quien cree imprescindible en su camino hacia la consecución de nuevos títulos para la casa blanca. "Deposito toda mi confianza en él, sólo hay que ver sus números. Para ser campeón, hay que marcar goles, y Ronaldo los asegura", aseguró el preparador transalpino. Hablar de Fabio Capello es sinónimo de triunfo inmediato garantizado. En 1991, cuando llegó al Milán para sustituir a Arrigo Sachi en el banquillo lo hizo campeón de Liga, Copa y Supercopa italiana. Tras cinco años de triunfos en la escuadra italiana, el técnico decidió cambiar de aires y recaló en las filas de un Real Madrid en crisis. Ordenó hasta 13 bajas, algunas de jugadores tan emblemáticos como Paco Buyo, Michael Laudrup, Iván Zamorano, Luis Enrique Martínez y Miguel González, Michel. Fichó a Bodo Illgner, Roberto Carlos Da Silva, Cristian Panucci, Clarence Seedorf, Carlos Secretario, Zé Roberto Da Silva, Pedja Mijatovic y Davor Suker. Toda una revolución con la que consiguió reconquistar el título de Liga en 1996. Al año siguiente, el Milán le pidió que volviera a instaurar sus valores de trabajo, orden y sacrificio entre sus jugadores, pero esta vez no consiguió los resultados esperados y se fue a la capital italiana para entrenar al equipo de Francesco Totti, la Roma. Como sucedió en sus anteriores etapas con otros equipos a los que entrenó, volvió a pedir muchos refuerzos y dar un buen puñado de bajas para, posteriormente, acabar devolviendo el Scudetto al club romano tras 18 años de sequía. En 2004 llegaría a las filas de la Juventus de Turín, donde arrebató el título de Liga al Milán y fue la pesadilla del equipo del club de Concha Espina en la Liga de Campeones. Después de dos años en la Vecchia Signora, retorna a la Castellana cargado de ilusiones para la afición blanca, que le recibió en el aeropuerto con gritos de "dales caña", refiriéndose a los jugadores.