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EDUCACIÓN

Noviembre será un mes de manifestaciones contra la reforma

Por Aarón AbadTiempo de lectura1 min
Sociedad26-10-2001

La huelga del pasado 25 de octubre que secundaron, según los organizadores, unos 700.000 jóvenes, es el principio de un mes en el que muchas voces se harán escuchar por las calles de toda España.

Según el Sindicato de Estudiantes, respaldado por Comisiones Obreras (CC.OO). y el Sindicato de Trabajadores de la Enseñanza entre otros, ha sido un primer paso que ayudará ha concienciar a los principales afectados, los estudiantes. También prevén que a las próximas manifestaciones, para el 31 de octubre y el 7 y 14 de noviembre, asistan más manifestantes. Las críticas contra esta reforma no sólo se centran en sus contenidos sino en que la rapidez con la que el Partido Popular quiere sacarla adelante deja poco margen para debatirla y estudiar las enmiendas con suficiente calma. En la última reunión, durante 17 horas, los grupos parlamentarios revisaron la mayoría de las 800 enmiendas presentadas, de las que sólo se aprobaron once. Entre los detractores de esta reforma se encuentran la mayoría de los partidos políticos, los estudiantes, gran parte de los rectores y profesores e incluso el personal no docente de los centros. Sus principales quejas se centran en la pérdida de autonomía de las universidades, de representación de profesores y estudiantes en el gobierno de la universidad y la implantación de exámenes específicos para cada centro universitario. Además, los estudiantes de Secundaria critican sobre todo la instauración que propone la LOU de un sistema de reválida. La reforma educativa tampoco deja claro el sistema de financiación de las universidades, por lo que muchos temen que acaben funcionando como empresas mediante un sistema similar al estadounidense. El Ministerio de Educación, encabezado por Pilar del Castillo y respaldado públicamente por unos 500 profesores, considera que el sistema educativo está anquilosado y que esta reforma acabará con muchos problemas como el de la endogamia y la compra de votos por parte de los rectores, una práctica muy común según el portavoz de Justicia el Partido Popular, Andrés Ollero.