CARBUNCO
La bacteria provoca dos muertes y más infecciones
Por Eva Pozueco Turabián1 min
Internacional26-10-2001
Las muertes de los dos trabajadores de correos infectados con carbunco han obligado a cerrar, por temor a nuevos contagios, la oficina que se encarga de la correspondencia del Departamento de Estado.
Las noticias de posibles contagios por carbunco no paran de sucederse. Los últimos casos siguen relacionados con la carta que recibió, hace días, el senador demócrata Tom Daschle. Lo alarmante es que en los tres casos de fallecidos se encontró la variante pulmonar de la bacteria, la más grave y difícil de curar. Tras estudiar las esporas que el senador Daschle recibió se ha asegurado que estaban mezcladas con un aditivo químico que las permitía sobrevivir en el ambiente. De ahí que se encontrara carbunco en el sistema de aire acondicionado de la oficina del senador. El diario estadounidense Washington Post ha asegurado que las esporas alteradas químicamente habían sido fabricadas en un laboratorio de EE.UU. También, las investigaciones apuntan a la posibilidad de que las cartas contaminadas hayan sido enviadas por grupos de extrema derecha. El mundo está alarmado ante este ataque biológico. Los países piensan fabricar medicamentos contra el carbunco. Canadá, por ejemplo, tiene intención de producir vacunas y EE.UU. ha encargado a la empresa alemana Bayer más de un millón de píldoras para tratar a los enfermos contagiados por la bacteria. “Toma penicilina ahora. Muerte a América. Muerte a Israel. Alá es grande”, es el escrito que se ha hecho público y que contenía esporas de carbunco. John Potter, director del Servicio Postal de Estados Unidos, ha reconocido ante los medios que nada garantiza la seguridad, desde el punto de vista sanitario, de que el correo que llega al país no esté contaminado