PAÍS VASCO

El País Vasco estudia el Estatuto para profundizar en su autogobierno

Por Mª Jesús Torres1 min

España27-10-2001

El Pleno de Autogobierno celebrado en la Cámara vasca el pasado jueves fue un nuevo foro de desacuerdo entre nacionalistas y constitucionalistas. En esta ocasión, el tema a debatir era el Estatuto y los niveles de autogobierno del País Vasco. En contra de los deseos del Partido Popular (PP) y el Partido Socialista (PSOE), el pleno se cerró con la aprobación de una Comisión de Profundización de Autogobierno, en la que populares y socialistas también quieren participar.

Se esperaba, por las palabras de Javier Arzalluz –presidente del PNV- en la III Asamblea de las Juventudes de este partido, que el debate sobre autogobierno en el Parlamento vasco girara en torno a la autodeterminación de los vascos y a la consulta sobre si ETA debe desaparecer. Pero el lehendakari, Juan José Ibarretxe, no hizo referencia explícita a la autodeterminación. Más bien se centró en pedir un nuevo acuerdo político en el País Vasco. Dicho acuerdo, dijo, deberá ser refrendado en consulta por la sociedad vasca y apoyado en un "gran pacto de Estado". Para alcanzar ese pacto, propuso la creación de una comisión especial que se encargue de profundizar en el autogobierno. Su propuesta fue aprobada "a golpe de voto", como afirmó el socialista Nicolás Redondo Terreros, con los 36 votos a favor del PNV, Eusko Alkartasuna e Izquierda Unida, frente a los 31 de PP y PSOE. La Comisión podría estar creada en noviembre y en julio tendría el primer balance de la tarea. Aunque PP y PSOE rechazaron la propuesta, acudirán a la comisión con los puntos que Ibarretxe presentó en el pleno: reconocimiento del pueblo vasco como sujeto político, derecho a establecer relaciones asociativas o incluso federativas con Navarra sin más limitación que la voluntad de los ciudadanos de ambas comunidades y bucear en la normativa comunitaria en busca de instrumentos para la relación con el País Vasco francés. Nicolás Redondo Terreros, secretario general de los socialistas vascos, ofreció su apoyo al lehendakari, siempre que no se trate de superar la Constitución. Desde el Gobierno se entendió el pacto como un "desafío institucional" y anunciaron "que no va tener ningún efecto". El portavoz del Gobierno vasco pidió a Aznar que deje "de amenazar" a la sociedad vaca y utilice "la palabra y el diálogo".