ORIENTE PRÓXIMO
Israel ocupa Belén como respuesta al asesinato de uno de sus ministros
Por Pablo Fernández1 min
Internacional19-10-2001
Un grupo de terroristas palestinos asesinó a tiros, el pasado miércoles, al ministro de Turismo de Israel, Rehavam Zeevi, que había dimitido dos días antes. El atentado ha servido al primer ministro israelí, Ariel Sharon, de excusa para romper los acercamientos con sus vecinos y para ordenar a su Ejército la ocupación de la localidad palestina de Belén.
Rehavam Zeevi, además de ministro, era diputado ultranacionalista del partido Unión Nacional y líder del movimiento colono radical. El pasado miércoles fue asesinado por el Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP). Este asesinato es, según el FPLP, una venganza por la muerte el pasado mes de agosto de su líder y una forma de hacer ver que los movimientos más radicales de Gaza y Cisjordania están en contra del proceso de paz entre palestinos e israelíes. La respuesta del Gobierno israelí no se hizo esperar. El primer ministro, Ariel Sharon, exigió inmediatamente al presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Yasir Arafat, la entrega de los autores del crimen o de lo contrario comenzaría una gran ofensiva militar sobre los territorios ocupados. La respuesta de la ANP al ultimátum fue clara: “No nos doblegaremos ante ningún ultimátum”. Sin embargo, Arafat cedió a las exigencias de Israel y ordenó la captura de varios miembros del FPLP por temor a las posibles represalias. Ariel Sharon interpretó el atentado del miércoles como un acto intolerable de provocación y decidió pasar a la acción. Por eso, el Ejército israelí entró el pasado viernes en los territorios ocupados e invadió la localidad de Belén. Más de 20 carros de combate y numerosos soldados se han hecho con el control de la ciudad y han ocasionado tres muertos y unos 100 heridos. Arafat ha pedido a la Comunidad Internacional que intervenga para evitar lo que considera un absoluto atropello. Con este ataque se dificulta el proceso de paz que en los últimos días había resurgido con fuerza tras aceptar Estados Unidos la propuesta de amparar la creación de un Estado palestino.