ISLAM
La UE no logra apaciguar las protestas violentas por las viñetas
Por Miguel Martorell2 min
Internacional19-02-2006
La gira del Alto Representante de Política Exterior y Seguridad de la UE, Javier Solana, no ha conseguido aplacar las protestas violentas en los países musulmanes por las polémicas viñetas del profeta Mahoma. En Libia, el asalto a una embajada italiana dejó un saldo de 11 muertos y más de 50 heridos. En Pakistán, las Fuerzas de Seguridad mataron a dos personas cuando una masa de protestantes trató de incendiar una sucursal del Union Bank.
En una gira por Oriente Próximo, Javier Solana se reunió con los jefes de Estado y los ministros de Exteriores de Arabia Saudí, Egipto, Jordania, Israel y Palestina. Con los diferentes mandatarios analizó la situación de crisis creada a raíz de las polémicas viñetas de Mahoma. El mensaje esencial que trasladó el Alto Representante de Política Exterior y Seguridad de la UE a los países musulmanes fue claro: Occidente no pretendía ofender al Islam en su libre ejercicio de la libertad de expresión. Sin embargo, su gira por Oriente no aplacó las respuestas violentas. Las manifestaciones acabaron en Pakistán con varias de las franquicias estadounidenses de McDonald's, KFC y Pizza Hut saqueadas e incendiadas. En la capital, Islamabad, las Fuerzas de Seguridad aplacaron las protestas con gases lacrimógenos para evitar que los manifestantes atacaran la zona diplomática. Las dos muertes se produjeron en Lahore, al este de Pakistán, donde la Policía disparó a dos personas cuando trataban de incendiar una sucursal del Union Bank. En Libia, los incidentes dejaron 11 muertes y más de 50 heridos tras una clara incitación del ministro italiano de Reformas, Roberto Calderoli. El mandatario del Gabinete del primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, apareció en público con una camiseta en la que aparecía una de las caricaturas de Mahoma. A Calderoli se le hizo responsable de las protestas en Libia. El ministro dimitió "por responsabilidad", pero subrayó no estar dispuesto "a tolerar la instrumentalización" que se ha hecho de las viñetas. Occidente y su responsabilidad La responsabilidad de los medios de comunicación occidentales en esta crisis es un asunto vital. El 16 de febrero, un diario alemán, el Tagespiegol, abría su edición con una caricatura del mundial de 2006 en Alemania, donde jugadores iraníes aparecían con chalecos bomba en un partido contra Israel. Sólo España ha terciado de manera política en la crisis. La Comisión de Asuntos Exteriores del Congreso de Diputados se reunió con más de una veintena de embajadores de países musulmanes o de mayoría musulmana. El presidente de la citada Comisión, Josep Antoni Duran i Lleida, pidió a los diplomáticos que trasladen a sus gobiernos un mensaje de serenidad y, ante todo, que eviten los actos violentos de protesta. En sus encuentros, se les explicó el principio de libertad de expresión occidental, aunque también se hizo hincapié en el respeto a todas las creencias y el deber de no ofenderlas. Estas reuniones son las primeras que un país europeo promueve con países musulmanes para tratar de apaciguar los ánimos de los islamistas más radicales, de ahí su vital importancia. Los embajadores presentes -Líbano, Mauritania, Siria, Egipto, Arabia Saudí, Marruecos, Libia, Iraq, Qatar, Emiratos Árabes Unidos, Túnez, Jordania, Argelia, Yemen, Sudán, Kuwait, Palestina, Pakistán, Turquía, India, Bangladesh, Indonesia, Senegal, Filipinas, Malasia, Kazajistán e Irán- coincidieron en dirigir una llamada a la calma a la población y parecieron comprender que los gobiernos occidentales no pueden actuar contra la libertad de expresión que tanto le ha costado conseguir a Europa.