ETA

Patxi López ve “buena voluntad en las partes” para el diálogo

Por La Semana2 min

España17-09-2005

Tanto el Ejecutivo como el Partido Socialista (PSOE) siguen partiendo de la base de que para cualquier negociación con los terroristas es necesario el cese definitivo de la violencia. No obstante, más allá de la versión oficial, los últimos días han estado llenos de declaraciones que dan indicios sobre la deriva de la nueva política antiterrorista de Zapatero.

Uno de los primeros en hablar fue el líder de los socialistas vascos, Patxi López, quien no dudó en asegurar que ve “buena voluntad en las partes” para abordar un diálogo que lleve a la desaparición del terrorismo. López recordó que “llevamos 27 meses sin asesinatos” y añadió que “ha habido algunas declaraciones del entorno etarra que pudieran suponer algunos pasos adelante”. López abogó también por establecer un pacto con los periodistas con el ánimo de no entorpecer el proceso. Estas palabras forman parte del carrusel de manifestaciones que se han podido escuchar a raíz de las informaciones que apuntan a la existencia de contactos entre la banda terrorista ETA y el Gobierno, un asunto sobre el que el dirigente vasco aseguró no tener conocimiento. Tampoco tiene constancia de esos acercamientos el secretario de organización del PSOE, José Blanco. El número dos del partido calificó esas informaciones como “especulaciones” y al igual que el resto de dirigentes socialistas, se inclinó por negar que tuviese conocimiento de que tales contactos se estuviesen produciendo pero sin desmentir nada. Mucho más claro fue el fiscal general del Estado, Candido Conde Pumpido al pronosticar que “el final de ETA esta próximo”. Estas palabras las pronunció en presencia del Rey Don Juan Carlos con motivo de la apertura del año judicial. La sesión de control al Gobierno en el Congreso también giró en torno a la actuación del Gobierno frente a la banda terrorista. “No hay ninguna novedad en materia de lucha antiterrorista y el Gobierno lo único que espera de ETA es que abandone definitivamente la violencia”. De este modo sorteó la vicepresidenta primera del Ejecutivo, Mª Teresa Fernández de la Vega, la presión a la que le estaba sometiendo el secretario general del PP, Angel Acebes desde la bancada contraria. Pero De la Vega no fue la única que tuvo que contestar a las preguntas de los populares. El ministro de Interior, José Antonio Alonso, tuvo que aclarar que las competencias penitenciarias siguen en manos del Estado y que el Gobierno no esta estudiando transferirlas a las comunidades autónomas. De ese modo, Alonso despejó las especulaciones sobre la posibilidad de un realojamiento de los presos etarras. Por causas similares también el ministro de Justicia, Juan Fernando López Aguilar tuvo que asegurar que el Gobierno “no tiene ninguna intención de modificar la legislación penitenciaria, penal y procesal en materia antiterrorista”. No obstante la vicepresidenta también afirmó que “si hay cualquier posibilidad de terminar con la violencia o con ETA, no tengan duda de que el Gobierno la aprovechará, con la ley en la mano para cumplir con el fin de la inmensa mayoría de los ciudadanos, que es el fin de ETA. Y mucho más clara fue al afirmar que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, mantiene informado al líder del PP, Mariano Rajoy, de todos los pasos del Ejecutivo en materia antiterrorista, un aspecto que el popular niega.