RALLIES

El rally de Gales se vistió de luto

Por Alejandro G. Nieto3 min

Deportes18-09-2005

El rally de Gran Bretaña se abrió con la cuenta atrás por el título de Sébastien Loëb y concluyó con tragedia edición: Michael Park, copiloto de Markko Märtin –antes lo fue de Colin McRae y Richard Burns–, perdió la vida tras chocar contra un árbol su Peugeot 307 en el segundo tramo de la última jornada. La prueba fue suspendida cuando Loëb ocupaba la primera plaza, pero el francés no quiso ganar y se hizo penalizar.

Marcus Grönholm se lo quiso poner difícil al actual campeón y fue el más veloz desde el comienzo. Pero en la segunda especial se quedó sin líquido de frenos y retrocedió 18 posiciones. Loëb no lo desaprovechó para ganar los dos siguientestramos, mientras sólo el noruego Petter Solberg conseguía seguir el ritmo al piloto de Citroën. Grönholm, con todo, pudo solventar los problemas mecánicos y logró hacerse con los dos últimos scratch (mejores tiempos) de la jornada: así el finlandés remontó de nuevo hasta la cuarta plaza, a cuarenta segundos de su compatriota de Mitsubishi Harri Rovanpera, tercero. El belga François Duval tuvo una actuación discreta y se mantenía quinto, a un segundo de Grönholm, mientras que el español Xevi era decimoctavo. Loëb continuó dominando en la segunda jornada: tan sólo dejó escapar la victoria en uno de los siete tramos disputados y aumentó la ventaja con respecto a Solberg en casi un minuto. Grönholm, pese a no poder plantar cara al líder del Mundial, continuó con su remontada y se encaramó a la tercera posición, aunque la posibilidad de continuar su progresión, con la segunda plaza a 45 segundos, ya era remota. La sorpresa de la jornada la dio el británico Mark Higgins (de Ford), que se impuso en la última especial. Pons sufrió un pinchazo, aunque ello no le impidió remontar tres posiciones. La última jornada había empezado sin sobresaltos para Loëb, que se mantenía su ventaja. Pero al comienzo de la segunda especial, el estonio Märtin perdía el control de su coche y se estrellaba contra un árbol. Las asistencias llegaron inmediatamente pero no pudieron evitar la muerte de Park, de 39 años. La carrera continuó, con un nuevo scratch de Loëb, hasta que el equipo que dirige Jean-Pierre Nicolas decidió retirarse y la organización suspender la prueba, con lo que los dos últimos tramos no se disputaron. Al no puntuar Grönholm, Loëb se proclamaba automáticamente campeón. Pero el francés renunció a la novena victoria consecutiva y a celebrar el campeonato en circunstancias luctuosas: por ello decidió llegar antes de tiempo a un control, con lo que fue penalizado con dos minutos y finalizó en tercera posición. La victoria pasó a ser para Solberg, mientras que Duval subió al segundo peldaño del podio y Pons acabó undécimo. El finés Rovanperä fue cuarto, por delante del austriaco Manfred Stohl (con un Citroën privado), del checo de Ford Roman Kresta y del escocés Colin McRae, que con un Skoda volvió a competir después de dos temporadas. La zona de puntos la cerró Higgins, octavo. A cuatro pruebas para el final del Mundial, Loëb mantiene una amplia ventaja con 99 puntos. Solberg, con 65 puntos, asciende hasta la segunda posición, con cuatro de ventaja respecto de Grönholm, quien se mantiene con 61 puntos. Märtin –que deberá buscarse nuevo copiloto y se planteará continuar compitiendo esta temporada– es cuarto, con 53, y Gardemeister quinto con 47 puntos. En la clasificación de marcas, Citroën acumula 127 puntos, seis más que Peugeot. Ford ocupa la tercera plaza, con 73 puntos, seguida de Subaru y Mitsubishi, que suman 63 y 47 respectivamente.