MACROJUICIO
¬Abu Dahdah¬ niega contactos con Ben Laden antes del 11-S
Por Gustavo García
2 min
España30-04-2005
Ya ha pasado la primera semana de un juicio contra de la célula terrorista de Al Qaeda en España que según los expertos, durará unos tres meses. De momento, durante estos siete días, ya ha prestado declaración el supuesto líder de la banda, Imad Eddin Barakat, Abu Dahdah.
La célula española presuntamente dio cobertura al grupo terrorista que el 11 de septiembre de 2001 provocó 2.973 muertes en Estados Unidos. Por ello, el fiscal Pedro Rubira considera a Abu Dahdah, Driss Chebli y Ghasoub Al Abrash Ghalyoun "cómplices" de los autores materiales del 11-S, y pide para ellos 62.512 años de cárcel y que indemnicen a cada familia de las víctimas con 300.506,05 euros. También atribuye a los dos primeros la preparación en Tarragona del encuentro entre los miembros más destacados de la célula del 11-S, Mohamed Atta, Ramzi Bin Al Shib y Mohamed Belfatmi. Según el fiscal, el objetivo de la reunión era "determinar los atentados contra EE.UU". Sin embargo, tras dos días de interrogatorio Abu Dahadah negó todo estos hechos. El que es considerado como el líder de la célula española de Al Qeada, negó ser el responsable del grupo islamista “Soldados de Alá” y aseguró que solo coincidía con el resto de imputados para “tomar el té”, rezar en mezquitas o en el colegio de sus hijos. Además negó haber viajado a Afganistán para reunirse con Osama Ben Laden y sostuvo que no conocía la existencia de la red terrorista internacional por la que es sospechoso hasta que se produjeron los sucesos del 11-S. Pero el fiscal ha asegurado que otro de los acusados, Mohamed Ghaleb Kalaje, había declarado que Abu Dahdah le había presionado para que fuera a Bosnia a hacer la guerra santa. Abu Dahdah ha negado esta acusación diciendo que Ghaleb "está muy confundido". Pero, según él, si alguien ha ido a esas zonas en conflicto "es una decisión personal". A los dirigentes de la célula española de Al Qaeda, según el juez Garzón, se les atribuyen los siguientes hechos: recibir y distribuir propaganda y revistas de diversos grupos fundamentalistas islámicos, o de los muyahidin de Bosnia o Afganistán; la captación de personas interesadas en el extremismo islámico violento, mediante adoctrinamiento paulatino y el reclutamiento formal, una vez superada la fase anterior, como muyahidin y su envío a Bosnia. Para otras 21 personas, en su mayoría de origen sirio, el fiscal solicita penas de siete a nueve años de prisión por pertenecer o colaborar con la célula. Cuatro de ellos suman otras peticiones de nueve años por tenencia ilícita de armas y explosivos.