La Policia desarticula el aparato de captación de la banda
Por Alejandro Requeijo2 min
España12-02-2005
Al tiempo que se especula con un posible diálogo entre el Gobierno y ETA, la policía sigue con su trabajo de acoso y derribo a la banda terrorista. La semana pasada una nueva operación finalizó con la detención de 17 miembros pertenecientes al aparato de captación que de esta manera fue desarticulado.
La acción fue llevada a cabo por la Comisaría General de Información y tuvo lugar en distintos puntos de la geografía española, concretamente en las tres provincias vascas, Navarra, Valencia y Cádiz. Han sido un total de 17 detenciones ejecutadas entre el martes y el viernes. Entre los detenidos, supuestos miembros “legales” de ETA, se encuentran algunos de los más importantes responsables de las labores de captación y colaboración con los comandos de la banda y a lo largo de esta semana ya han prestado declaración ante el juez de la Audiencia Nacional, Baltasar Garzón. Entre la información requisada en sus domicilios, se encuentran informes acerca de distintos miembros de seguridad y varios políticos. Una información que en estos momentos ya esta siendo analizada por la Policía con vistas a realizar nuevas acciones. Precisamente, esta operación ha sido posible gracias a las investigaciones realizadas a partir de la documentación incautada en su día al que fuera jefe militar de ETA, Juan Ibón Fernández de Iradi, Súsper. De este modo, mientras ETA intentaba sin éxito una nueva matanza en Madrid con la colocación de un coche bomba, la banda terrorista se quedaba sin su aparato de captación de nuevos miembros. Un golpe al futuro de la estructura de la banda que se suma a las numerosas operaciones policiales que se vienen produciendo contra ETA en los últimos meses. El ministro de Interior, José Antonio Alonso, anunció la “completa desarticulación” de su estructura de reclutamiento, “imprescindible para la subsistencia de ETA”. Precisamente parte de ese futuro de la banda, un total de 35 miembros de las organizaciones juveniles, más conocidos como los “cachorros” de ETA, tuvieron que acudir, la semana pasada, a la Audiencia Nacional para el primer macroproceso contra el entorno terrorista. Entre ellos se encontraban algunos ya condenados y otros de momento en libertad. En el momento del reencuentro entre viejos compañeros, las risas y los gritos de ánimo se apoderaron de la sala como si de una herriko taberna cualquiera se tratara. Además los acusados tuvieron tiempo de prepararse unas camisetas para la ocasión en las que se podía leer: “Por los derechos sociales y políticos. Jóvenes adelante.” Precisamente de ello, de velar por que se cumplan todas la garantías procesales contra los detenidos, se encargará el Gobierno vasco que ya ha enviado un observador al juicio. Un hecho que ha generado la indignación entre los familiares y las asociaciones de Victimas de terrorismo.