CONSTITUCIÓN EUROPEA
El referéndum enfrenta a PP y PSOE en la primera semana de campaña
Por Raúl Romero Martín3 min
España12-02-2005
La Constitución Europea ha sido esta semana la patata caliente entre Gobierno y Oposición. El presidente del Gobierno llama a vencer la pereza y la distancia ante las urnas el 20-F mientras que los populares acusan a los de Zapatero de utilizar Europa como arma arrojadiza.
De Madrid a Barakaldo pasando por Sevilla y Murcia. Zapatero y Rajoy, casi un año después, vuelven a recorrer España pidiendo el voto. Esta vez, no habrá un vencedor, aunque las segundas lecturas de la votación del próximo 20 de febrero darán para mucho a los analistas políticos. Gobierno y Oposición piden el “Si” a Europa; el Gobierno tiene que hacerlo después de los vaivenes de la firma de la Constitución. Y la Oposición, que todavía tiene muy presente Tratado de Niza, siempre ha defendido el proyecto europeo. Los que no lo tienen claro son los españoles, las dudas y la abstención serán decisivas el próximo 20-F, hasta entonces Europa esta de campaña para socialistas y populares. El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, dijo el sábado en Sevilla que agradece al PP su apoyo a la Constitución europea, porque al ofrecerlo "van a ayudar a los ciudadanos españoles y se van a ayudar a sí mismos también". Zapatero se dirigió en estos términos a la oposición tras subrayar la importancia de que la sociedad venza "la pereza y la distancia" ante el referéndum del 20 de febrero y tras señalar que el voto negativo carece de sentido en esta consulta, porque equivale "a la nada, a la resignación, a asumir que no hay esperanza sobre nuestro futuro". Rodriguez Zapatero sostuvo que la Constitución europea es sobre todo un sinónimo de convivencia en paz y progreso, y en este sentido la comparó con la Carta Magna aprobada en referéndum en España en 1978. Se trataba entonces -dijo- de organizar la vida del país de acuerdo con las reglas de juego democráticas, y se trata ahora de fijar unas normas similares a escala continental, para que el sistema de valores que comparte Europa sea garantía de estabilidad para los veinticinco países que integran la UE y de esperanza para las zonas más atrasadas del planeta. Resaltó, en este sentido, la voluntad solidaria de Europa con los países subdesarrollados. ”Cuando se trata de Europa, las cuestiones de política interior no valen”. Lo dijo Manuel Fraga en Santiago de Compostela, en el mitin del PP por el sí a la Constitución europea, que protagonizaron Mariano Rajoy y Jaime Mayor Oreja, y el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso. Rajoy llamó irresponsable al presidente del Gobierno, porque con sus críticas al PP, a pesar de ser el único partido que apoya el sí a la Constitución Europea, dijo, "parece que está haciendo más en favor del no y la abstención que del sí". Y para apoyar su afirmación expuso los cuatro hechos que a su juicio se pudieron percibir el viernes en Barcelona, en el mitin del PSC que unió a Zapatero y al presidente francés, Jacques Chirac. El primero de ellos, que dio lugar a la mofa de Rajoy, la gripe que esgrimieron el canciller alemán, Gerhard Schröder, y el presidente del Gobierno italiano, Silvio Berlusconi, para no acudir a la cita. Una vez comprobada la epidemia en Europa, el líder del PP anunció una iniciativa para "mejorar las vacunas contra la gripe".