Esta web contiene cookies. Al navegar acepta su uso conforme a la legislación vigente Más Información
Sorry, your browser does not support inline SVG

SALUD

Sanidad presenta una estrategia de prevención de la obesidad

Por Patricia de Pablo VidalTiempo de lectura1 min
Sociedad11-02-2005

La Estrategia para la Nutrición, Actividad Física y Prevención de la Obesidad (NAOS) tiene como interés alejarse de las prohibiciones y no limitar el disfrute de las delicias con las que cuenta la cultura gastronómica de España. Salgado explicó que las posibles medidas normativas de la Estrategia NAOS se basan en actuaciones, acuerdos y códigos de regulación, por lo que en realidad son acciones voluntarias.

El documento de la Estrategia NAOS ha sido elaborado con la colaboración de la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y la de más de 80 asociaciones, organismos públicos y privados y sociedades científicas. Este texto no se muestra contrario a ningún hábito alimenticio, ni habla de alimentos buenos o malos, simplemente es una apuesta por una vida con una alimentación rica, plural y divertida. La obesidad en España afecta a uno de cada siete adultos, y la mitad de la población presenta sobrepeso. El Ministerio de Sanidad y Consumo considera que ese sobrepeso en la población es un problema serio y con múltiples condicionantes, por lo que las medidas a aplicar deben ser complementarias y mantenidas en el tiempo para alcanzar así el objetivo. Salgado señaló que las primeras medidas normativas, si se deben tomar, no pueden afectar a la industria, ya que todos los componentes alimenticios están dentro de la legalidad. Además, destacó la buena relación con este sector y su confianza en el cumplimiento de los códigos suscritos, ya que se han comprometido a algo a lo que nadie les obligaba. Así, Sanidad ha alcanzado acuerdos con las empresas de alimentación para reducir progresivamente grasas y azúcares; sobre las franjas horarias y los contenidos de la publicidad de alimentos y bebidas para jóvenes; también con numerosos restaurantes sobre el tamaño de las raciones o el uso de aceites de fritura y con las asociaciones de panadería para reducir en cuatro años el porcentaje de sal en el pan del 2,2 al 1,8 por ciento.