PLAN IBARRETXE

PSOE y PP se comprometen a frenar la propuesta soberanista aunque discrepan en la forma

Por Noelia Hernández Martín2 min

España07-01-2005

El Partido Socialista y el Partido Popular continúan enfrentados ante la forma de parar el Plan Ibarretxe, aprobado en el Parlamento vasco con el apoyo de los sucesores de Batasuna. Ambos partidos formarán un frente común para frenar la aprobación del plan, aunque el PP considera que las estrategias "deben llegar mucho más lejos".

El Plan Ibarretxe no conseguirá el visto bueno en el Parlamento, eso es lo único en lo PP y PSOE están de acuerdo. De hecho, se han comprometido a no dar su apoyo en la Cámara. Sin embargo, ambas formaciones no comparten los mismos mecanismos a la hora de frenar el Plan del lendakari, Juan José Ibarretxe. En los últimos días, el presidente del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, ha recibido presiones insistentes desde el PP para bloquear cualquier debate del Plan, desde la petición de que el Gobierno lo recurra ante el Tribunal Constitucional hasta que el PSOE se una a él y desestime su tramitación en la Mesa del Congreso de los diputados. El Partido Popular siempre ha mostrado su decisión de luchar contra la propuesta soberanista desde la vía judicial. De ahí, que cuando el plan se aprobó en el Parlamento vasco, los populares pidieron que se recurriera ante el Tribunal Constitucional. Sin embargo, el PSOE ha desestimado esta propuesta. Algo que tampoco ha sentado nada bien a los populares es la decisión de Zapatero de reunirse antes con Ibarretxe que con Mariano Rajoy. PP y PSOE también han tenido discrepancias en la forma de debatir el plan y echarle por la borda en la Cámara. El Partido Popular no quiere que llegue hasta el hemiciclo, su intención era frenarlo en la Mesa del Congreso. Sin embargo, los socialistas son partidarios de su tramitación parlamentaria porque de lo contrario, sería “impedir el debate”, según asegura el secretario general del PSOE en el Congreso, Diego López Garrido. De esta forma, el Plan pasará primero por la Mesa de la Cámara y, si cumple los requisitos formales que se exigen para su admisión, se debatirá en el hemiciclo donde PP y PSOE lo desestimarán. En el trasfondo de esta disputa por dar un sí o un no al plan soberanista, está la organización que cada partido quiere a España. Los populares se muestran muy duros ante la propuestas separatistas porque las consideran una amenaza para el Estado de las Autonomías. Sin embargo, el PSOE busca algo parecido a un Estado Confederal, algo que quedó en evidencia cuando Zapatero cuestionó ya hace tiempo el concepto de nación.