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MAREMOTO

El mundo se vuelca para ayudar a las víctimas de la catástrofe asiática

Fotografía
Por Patricia de Pablo VidalTiempo de lectura2 min
Sociedad08-01-2005

La Organización de las Naciones Unidas (ONU) organiza y distribuye la ayuda humanitaria internacional, el G-7 acuerda la reducción de las deudas de las naciones afectadas, numerosos países envían efectivos militares a las zonas afectadas, la Comisión Europea se vuelca para conseguir la cooperación económica de los estados miembros... Y así una larga lista de solidaridad mundial con las víctimas de Asia.

La ONU está trabajando para coordinar la asistencia a las víctimas del maremoto y ha abierto centros de ayuda en Indonesia y Tailandia, con el propósito de mejorar la eficacia en las tareas de ayuda y en la identificación de las necesidades prioritarias de los damnificados. Estos centros también servirán de enlace con los once ejércitos de los países contribuyentes que están distribuyendo ayuda hasta los lugares más remotos. Estos efectivos militares proceden de Estados Unidos, Gran Bretaña, India, Australia, Malasia, Singapur, Alemania, Francia, Corea del Sur, Nueva Zelanda, y Pakistán. Además, el centro principal de ayuda abierto en Banghok, Tailandia, tendrá la función de coordinar el trabajo de las agencias de la ONU y de las 440 organizaciones no gubernamentales que están actuando sobre el terreno. El presidente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Rodrigo Rato, se ha puesto manos a la obra para canalizar las ayudas financieras de los países que el organismo. Rato anunció que el FMI dispone de una ayuda económica de mil millones de dólares para las naciones afectadas por el maremoto. Australia y Alemania son los países que más han aportado: 764 millones y medio de dólares el primero, y 680 millones el segundo, que sumados a los dos mil millones recaudados por otros países de la Comunidad Internacional, supera los tres mil millones de dólares. Entre los máximos donadores están Japón, con 500 millones de dólares, y Estados Unidos, con 350 millones. La Unión Europea, por su parte, desbloqueó inicialmente desde Bruselas 30 millones de euros para enviarlos a Sri Lanka, India, Maldivas, Indonesia y todas aquellas zonas afectadas. La Comisión Europea ha enviado ya 436 millones de euros (unos 450 millones de dólares) para la ayuda humanitaria. Además, cada vez son más los Estados miembros que se unen al envío de tropas y efectivos militares y humanitarios para la realización de las tareas de ayuda y colaboración en las naciones asiáticas, entre ellas, España. Además, los siete países más industrializados del mundo (G-7) han acordado la reducción de buena parte de las deudas internacionales de los países damnificados por la catástrofe natural. El ministro de Economía británico, Gordon Brown, preside este año el G-8, integrado por los siete más ricos y Rusia. Brown ha anunciado el acuerdo entre estos países para conceder la suspensión del pago de la deuda exterior de las naciones asiáticas afectadas por el reciente maremoto. De esta forma, las zonas víctimas del maremoto se ahorrarán anualmente, alrededor de 4.500 millones de euros.