PREMIOS LITERARIOS
¿Puede un libro ganar dos Premios excluyentes?
Por Roberto González García3 min
Cultura24-11-2004
En las normas de participación de los tres concursos parece quedar claro que las obras presentadas deben ser originales y no estar pendientes de ningún fallo en otro proceso literario. Aún así, Antonio Gracia, presentó su poemario Devastaciones, sueños al premio José de Espronceda (Almendralejo), Loewe y Perede (Santander) ganando los dos primeros y siendo finalista en el tercero. El escándalo literario está servido.
Cuando se supo sobre quién recaía el premio Loewe, el autor se dió prisa en renunciar al premio de Almendralejo. Por su parte, el Ayuntamiento de Almendralejo ha decidido no aceptar la renuncia de Antonio Gracia porque que el profesor alicantino asistió personalmente en el mes de octubre al acto de entrega del premio, recibiendo simbólicamente el cheque con los 6.000 euros, su dotación económica frente a los 16.500 euros del premio Loewe. El propio autor, en el acto de entrega del Loewe, daba pistas de esta historia al explicar que había cometido una equivocación: "Tenía dos inéditos con título parecido —se llama Desolación el otro— y envié el que no tenía que enviar", aseguró Gracia, quien confesaba a los periodistas que llevaba "27 horas sin dormir" por esa equivocación, que a lo mejor se debe a un error informático, por traer a la mente otro escándalo literario protagonizado por una de las reinas de la tarde televisiva. "Ayer por la mañana, cuando abrí el correo vi un mensaje de Antonio Gracia en el que me comunicaba que renunciaba al premio por no corresponderse el título con el contenido de la obra y tenía que comprobarlo", explicaba Maite, bibliotecaria de Almendralejo y coordinadora de los premios literarios. Según sus palabras, el autor tiene todo el derecho a tomar esta decisión pero resulta chocante cuando recuerda que "el 29 de octubre estuvo aquí para recibir oficialmente el galardón de manos del alcalde, acto en el que se le hizo entrega de un talón simbólico —el premio está dotado con 6.000 euros". Sin embargo, Maite también subraya que, al contrario de lo que sucedió con el ganador de novela —que sí cobró el premio—, Gracia no recibió el dinero al no facilitar la documentación necesaria para hacer la transferencia: "Estuvo mareando la perdiz". Asimismo, y un tanto desconcertada y molesta, señala que, según las claúsulas de este premio de poesía, "no se podrán premiar trabajos que estén pendientes de otros fallos". La Fundación Loewe, que entrega el Premio que lleva su nombre, ha lavado su conciencia declarando desierto la convocatoria de este año. Enrique Loewe, presidente de la Fundación no podía ocultar su indignación: "Es incomprensible e inaceptable la actitud de Gracia, quien ha actuado de mala fe", y después le calificón de "cazapremios" y "provocador". También ha querido destacar la honestidad del jurado, "que no conocía quién era el ganador" por el sistema de plica y sobre cerrado, y su "exquisita manera de trabajar", que calificó de "inapelable", frente a la conducta de Gracia. "Uno no puede jugar con los premios, es un bandolero". Algunos miembros del jurado -Carlos Marzal, Clara Janés, Luis Antonio de Villena y Caballero Bonald- confesaban ayer sentirse "indignados" y "engañados" por el comportamiento de Antonio Gracia. El jurado del Loewe, presidido por Carlos Bousoño y al que se han presentado 1.108 obras procedentes de 35 países, valoró en el poemario ganador "la madurez y el tono meditativo". Elogió también "su forma ajena a la retórica a la hora de plantear las cuestiones", y destacó su "honradez, escritura nítida y pauta melódica fluida". Esa honradez está ahora puesta en duda. Lo que sí está claro es que para Victoria Pérez Pachón, concejala de Cultura de Almendralejo, el escritor alicantino ha participado en ambos certámenes con la misma obra, con el mismo título y extensión y de ella sólo ha cambiado el orden en algunas estrofas, según se ha podido comprobar tras la llamada de la Fundación Loewe para confirmar que la obra ganadora había sido premiada en Extremadura.