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UNIÓN EUROPEA

La Unión Europea ya tiene Constitución

Fotografía
Por Salva Martínez MásTiempo de lectura2 min
Internacional31-10-2004

Roma acogió otro acto histórico para la UE. El 25 de Marzo de 1957, la capital italiana vio nacer la Comunidad Económica Europea, la CEE. Las firmas de los líderes europeos son un paso más hacia la unión política.

El protocolo de la UE tuvo una fecha excepcional el pasado viernes 29 de octubre. Ese día, el centro histórico de Roma se puso a disposición de las delegaciones de los 25 países de la Unión. Los jefes de Gobierno y de Estado y altos cargos de la Unión Europea que llegaron desde muy temprano a la capital romana aterrizaron en un Circo Máximo convertido en helipuerto. Desde allí, se desplazaron hasta el Campidoglio romano, lugar donde firmaron la Constitución europea. El acto se abrió con el himno que el tratado constitucional establece como composición musical de la UE, el himno de la alegría de la novena sinfonía de Ludwig Van Beethoven. Tras la bienvenida que dieron el alcalde de la capital italiana, Walter Veltroni, y el primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, se pasó al estampado de las firmas. El desfilar de figuras de la política europea tuvo a otros representantes de primer orden en calidad de invitados. Los dirigentes de dos países que serán miembros de la UE en 2007, Bulgaria y Rumania. Junto con éstos estuvieron los de dos países candidatos, Croacia y Turquía. Claro que organizar una “jornada histórica” como ésta requiere previsiones. De hecho, se sabía que Roma se engalanaría para estos fines desde que el Consejo europeo aprobara por unanimidad el proyecto de Constitución el pasado 18 de junio. Además de prever el lujo ostentado el pasado viernes, también se dieron muestras de haber planificado minuciosamente el dispositivo de seguridad que tomó Roma aquel día. Tanto es así, que las familias del barrio donde se sitúa el Campidoglio romano tuvieron que elegir entre estar cinco horas de encierro en sus casas o pasar ese tiempo fuera del barrio, ya que todo tráfico, aéreo, rodado y peatonal, quedó cortado durante el evento. Esta medida y todas las otras que acompañaron a la firma del texto constitucional europeo dejaron el sentimiento de que se prohibía el acceso a la UE el día en que ésta se dotaba de mayor identidad política.