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FINANZAS

El SCH se convierte en el octavo banco del mundo tras la compra de Abbey

Por La SemanaTiempo de lectura1 min
Economía15-10-2004

El presidente del Santander Central Hispano (SCH), Emilio Botín, da una de cal y otra de arena. Si hace unos días la Audiencia Nacional le acusaba de falsedad y varios delitos fiscales, ahora la entidad que preside se apunta un tanto: la compra de Abbey National y el pasaporte para convertirse en el octavo banco del mundo.

Los accionistas de Abbey National decidieron en una junta extraordinaria aprobar la venta al SCH a cambio de 13.400 millones de euros en metálico y acciones. Los títulos de Abbey dejarán de cotizar en la bolsa de Londres el 12 de noviembre al cierre del mercado si, como se espera, se completa en esa fecha la venta de la entidad británica banco español. El banco presidido por Emilio Botín tendrá 6.279,4 millones de acciones una vez ampliado su capital para atender al canje de títulos de Abbey. La operación ha tenido el viento a favor desde el comienzo, pues fue aprobada por la Comisión Europea (CE), no tuvo contraofertas de otros bancos pese a algunos amagos y los reguladores británicos señalaron también que no aprecian "impedimentos materiales". El Santander espera expandir así su negocio en el rentable mercado británico, mediante la aplicación de un plan de ahorro de costes en un banco que en los dos últimos ejercicios registró pérdidas. El objetivo es neutralizar los riesgos de su negocio en América Latina y consolidar la estrategia que ha llevado a cabo Emilio Botín desde que preside el Grupo Santander, siempre basada en compras y nunca en fusiones. Abbey aportará al SCH una capitalización de 12.482,70 millones de euros, 18 millones de clientes, 741 sucursales y casi 26.000 empleados, aunque la entidad española ya ha señalado que recortará unos 3.000 puestos de trabajo.